La Guardia Civil ha informado de este viernes de que efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) han intervenido 350 kilogramos de aguacates que, de forma ilegal, se comercializaban en un lugar indeterminado de Tenerife.
Los aguacates intervenidos, de la variedad hass, estaban dispuestos para su venta y distribución en un establecimiento de mercancías perecederas, y sin las etiquetas de trazabilidad que se utilizan para informar del origen de los alimentos, su legítima procedencia y si son aptos para el consumo.
Sin control sanitario
Los agentes precintaron e inmovilizaron los 350 kilogramos de aguacates, ya que carecían de control sanitario y los responsables del local no demostraron que estuvieran aptos para el consumo ni su procedencia.
Los efectivos del Seprona notificaron actas de denuncia por infracciones a la ley de calidad agroalimentaria en los artículos 50 y 51 como infracciones leves y graves al carecer la fruta intervenida del etiquetado correspondiente, así como de la documentación que garantizaría la trazabilidad del producto que se está comercializando y que protege la salud de los consumidores.
Sanciones
Explica la Guardia Civil que las infracciones leves serán sancionadas con apercibimiento o multa de hasta 4.000 euros, las graves con multa comprendida entre 4.001 y 150.000 euros, y las muy graves con multa comprendida entre 150.001 y 3.000.000 de euros.
En los casos de incumplimiento de las obligaciones económicas destinadas a la financiación del órgano de gestión, la cuantía económica de las multas se incrementará hasta alcanzar el valor del 30 por ciento de la cuantía objeto del impago, se agrega en un comunicado.