60 años al son del bolero

Da gusto conocer y hablar con amigos de la música que llevan toda su vida vinculada a ella. Y sobre todo, sentir, como a pesar de los años, siguen teniendo la misma pasión

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Da gusto conocer y hablar con amigos de la música que llevan toda su vida vinculada a ella. Y sobre todo, sentir, como a pesar de los años, siguen teniendo la misma pasión. Esto nos ha ocurrido al conocer y hablar de la trayectoria del Trío Ucanca. 

El pasado Viernes, se rindió homenaje a este trío señero en el municipio de Candelaria, concretamente en la plaza del Centro Comercial Punta Larga. Con motivo de este encuentro se dieron cita el Trio Acaimo, otro de los grupos veteranos del panorama musical canario en la voz de Olga Benavente y el grupo “el Quinteto” encabezado por Héctor González y Candelaria González.

Esta fue la propuesta musical dirigida al público asistente, con el objetivo común de rendir un homenaje sentido al Trio Ucanca.

Este trío que cumple 60 años, tiene como objetivo seguir en la música hasta que el cuerpo aguante. Músicos de la vieja escuela que no entienden la vida sin música y sin ensayos.

Para hablar del trío hay que nombrar a Saturnino Rodríguez (chicho) alma máter del grupo y único integrante que lleva desde los inicios del trio. Sólo con escuchar su voz y como cuenta el día a día, ya se interpreta que es un apasionado de la música y de su público. Nosotros a estas alturas sólo queremos pasarlo bien y hacer lo que nos gusta, nos contaba en la radio la pasada semana, y siempre con la humildad de un grande para poner en valor el trabajo de los demás y sobre todo de sus compañeros.

Hay que destacar el cariño del público en el momento que salieron de los camerinos y entraron en la plaza, sin empezar a actuar, contamos más de veinte saludos de la gente que se encontraba en el recinto para disfrutar la actuación. Y con una templanza única de los veteranos, fotos y saludos por doquier, sin que desapareciera la sonrisa de sus rostros.

El festival arrancó la presentación de otro veterano de los escenarios, una voz acertada para el evento, Cándido López, o como es mundialmente conocido, “el de producciones OYE”. Con unas tablas para desarrollar esa labor que sólo tienen los veteranos y bregados en mil batallas.

Con su buen hacer presentó al Trio Acaymo, con Olga Benavente al frente, comenzaron la actuación con sus canciones de toda la vida, no solo porque era el repertorio preparado sino que también era la petición del público que llenaba el recinto. Vítores y aplausos que no paraban de sonar cada vez que terminaba un tema. Se va notando el paso del tiempo, así que hay que agradecer que siga al pie del cañón y debemos reconocer el esfuerzo que hacen.

Foto TyF

Seguidamente, comenzó “El Quinteto” formación musical dirigida por Héctor González y con la voz de Candelaria González. Este colectivo esta formado a su vez, por tres músicos de categoría universal y que hacen que el conjunto suene de maravilla. Sólo tienen una dificultad, que es elegir el repertorio, tal y como decía Candelaria en la presentación, al estar influenciados por tantos tipos y artistas. Pero aún con esfuerzos, prepararon un recital exquisito, acorde a la cita y al público. Hay que destacar los aires de lima de Valsequillo en la voz de Candelaria, que alimentaba el alma. A nuestra opinión, una de las mejores melodías de nuestro folklore.

Foto TyF

Y para cerrar, el Trio Ucanca, que ya iban bastante emocionados por el recibimiento que le habían dado, antes de subir. Pero con las horas de trabajo y escenario que tienen, allí se subieron y comenzaron a actuar, toda vez, que Cándido a través de una sentida presentación, hizo a la gente emocionarse.

La música de toda la vida, que no por ello, puesta en un escenario hace el disfrute de un público pendiente a escuchar esos boleros de antaño.

Queremos felicitar a Chicho y sus compañeros por la actuación y el trato hacia nosotros, pero sobre todo les queremos desear muchos ánimos y energía para que sigan al pie del cañón durante mucho tiempo, manteniendo el amor por la música que muestran cada vez que se suben a un escenario.