Iglesia de Arucas de estilo neogótico / TURISMO ISLAS CANARIAS
Iglesia de Arucas de estilo neogótico / TURISMO ISLAS CANARIAS

Esta es la iglesia gótica mejor conservada de Canarias: revestida con una piedra única en el mundo

Tardaron más de siete décadas en convertirla en una de las iglesias más espectaculares de Canarias y cada detalle de su fachada fue esculpido a mano por expertos canteros

Irene Cartaya

En lo más alto de una ciudad con gran herencia histórica, se alza una de las edificaciones más impresionantes de Gran Canaria. Sus torres esbeltas y su majestuosa fachada dominan el paisaje incluso en la lejanía, convirtiéndola en un referente arquitectónico y espiritual. Construida a lo largo del siglo XX, esta estructura refleja la dedicación de generaciones de artesanos y fieles que contribuyeron a su edificación con esfuerzo y devoción.

Esta imponente iglesia —conocida como la Catedral de Arucas por su magnitud y estilo— es un ejemplo maravilloso de la arquitectura neogótica en Canarias. Su construcción, iniciada en 1909, se prolongó por más de siete décadas, dando como resultado un templo de proporciones monumentales elaborado con la célebre piedra azul de Arucas. Cada detalle de su fachada fue esculpido a mano por expertos canteros, lo que la convierte en una de las edificaciones más fascinantes del archipiélago. No es para menos. 

Una joya neogótica en Canarias

Antes de que este colosal templo dominara el casco histórico, una pequeña ermita ya ocupaba el lugar en el siglo XVI. Este espacio sagrado, que creció con el tiempo hasta convertirse en un importante templo renacentista, sirvió como punto central de la vida religiosa y social de la comunidad. Con el paso de los años, la iglesia original quedó obsoleta, dando paso a la necesidad de una estructura más grande y acorde con el desarrollo de la ciudad.

Uno de los elementos más impresionantes de esta iglesia son sus vitrales multicolores, que inundan el interior con un espectáculo de luz y color. Fabricados en talleres franceses de renombre, estos vitrales representan diversas escenas bíblicas y aportan una atmósfera solemne y mística al recinto. Además, su planta en forma de cruz y sus elevadas bóvedas refuerzan la sensación de grandiosidad y espiritualidad.

Una piedra única

La piedra azul servida para la fabricación de la iglesia de Arucas es un elemento único en Canarias. Está formada por una mezcla de minerales que son los causantes de ese tono azulado junto a los microcristales incrustados que reflejan un brillo celestial —la piedra perfecta para construir una iglesia—. 

Conseguirla no es nada fácil porque requiere de técnicas que han sido perfeccionadas a lo largo del tiempo. Destreza manual y respeto por el medio ambiente, la piedra azul de Arucas tiene una historia fascinante