El reconocido diseñador canario Sergio Macías, una figura destacada en el panorama del diseño y la escenografía que asume el reto del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife 2026 con el aval de más de dos décadas de experiencia y un impresionante palmarés de premios en el ámbito creativo.
Macías llega al equipo creativo del Carnaval con el objetivo de aportar una visión fresca y novedosa, respaldada por sus 22 años dedicados al diseño de interiores, escenografía y proyectos de gran envergadura. Su trayectoria habla por sí sola: su estudio ha sido merecedor de cinco galardones en los V Premios Canarias de Diseño 2019, once premios en la VI edición de los Premios Canarias de Diseño 2023, y ha sido nominado en la prestigiosa Bienal Iberoamericana de Diseño (BID20).
Pero donde Macías encuentra su verdadera pasión es en la escenografía, terreno en el que ha demostrado una maestría indiscutible como autor de los escenarios del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria en 2020, 2022 y 2023. Todas estas producciones destacaron por su creatividad desbordante, impacto visual espectacular y un minucioso trabajo técnico que maravilló tanto al público presencial como a los millones de espectadores que siguieron las galas a través de las pantallas.
Pregunta: A modo de introducción me gustaría saber si eres carnavalero, si te gusta el carnaval.
Respuesta: Hombre, sí, bastante, bastante. De hecho, bueno, yo me crié en Las Palmas al lado de Santa Catalina y fui murguero, incluso infantil, o sea que lo llevo desde chiquitito en las venas. Y sí, desde luego, de siempre lo he sido y bueno, con el tiempo, pues uno me ha ido colocando con el tiempo y con la profesión pues acabando siendo escenógrafo, tanto de Las Palmas y ahora, en Santa Cruz de Tenerife con un gran orgullo.
¿Cómo surge la posibilidad de crear el escenario Santa Cruz de Tenerife 2026?
Pues nada, pues resulta que fui invitado a participar en opciones de escenógrafo para el año 2026 y fui elegido. Al final pues acepté la invitación y bueno, me sentí un privilegiado de poder participar en ello y además ser elegido para tal reto, porque no deja de ser un reto.
Eres uno de los pocos escenógrafos que ha estado en las dos capitales del archipiélago Canario, los dos grandes carnavales.
Sí, supongo que no hay tantos, digo yo, que hayan hecho las dos capitales
¿Cómo definirías tu escenario de cara al 2026?
Bueno, al final es una propuesta un poco arriesgada en el sentido de que vamos a hacer una escenografía muy temática, donde realmente tratamos de incorporar el exterior a un interior. Es decir, todo lo contrario a lo que normalmente se prevé.
La propuesta se basa en una gran plaza de un barrio, de un pueblo, inspirado en la arquitectura colonial de todos los países latinos, como puedan ser Caracas, Venezuela, Cuba, Puerto Rico, cualquier tipo de ciudad o capital latinoamericana, tanto caribeña como también incluso europea. Nos basamos un poco también en las islas, como no, con el vínculo que tenemos con Venezuela y con otros países caribeños.
La escenografía está basada en eso, en una gran plaza donde invite al baile, al bullicio de las calles, donde realmente se crearon los ritmos latinos, que es el tema del próximo año. Esos ritmos latinos tienen influencias tanto de los orígenes indígenas como afroamericanas, porque tienen muchas influencias, y después la parte última fue la europea, la colonizada, donde toda esa mezcla de ritmos da lugar a esta creación.
Para el que no la haya visto visualmente, se trata de una gran plaza con mucho arte, con mucha reivindicación, muchas entradas y salidas. La escenografía invita a que todos los figurantes, artistas, cantantes, interactúen mucho con el plató en sí, porque hay balconadas, muchas puertas, casas, pórticos… hay un montón de juego.
Eso convierte la escenografía en más teatral que carnavalera, y así podemos jugar con todas las industrias musicales. Y bueno, esa es un poco la descripción que te puedo dar.
¿’Los ritmos latinos’ te gustaba como alegoría para el escenario? ¿O hubieras preferido otra?
No sabría decirte. Muchas veces te sorprende porque los temas se van acabando, tanto de una capital como de otra. Uno siempre está atento a qué ocurre en la isla de enfrente, y al final siempre es verdad que los temas se van terminando.
El tema de los ritmos latinos era un poco ambiguo. Al principio, cuando lo oyes, dices: "Eso abarca demasiado, hay demasiada posibilidad, está un campo demasiado ambiguo y abierto a cualquier diseño". Pero después vas estudiándolo, lo vas creando, vas investigando un poco en lo que se trata el tema, y la verdad que me fue gustando después cada vez más, hasta que el resultado nos enamoró.
Creo que ha gustado bastante la propuesta que hemos hecho en el pasado martes, y estamos contentos con el resultado. O sea que al final sí, conectamos con la alegoría y confiamos en que el resultado es muy atractivo.
¿La idea original es muy diferente a lo que presentaste el pasado martes, o más o menos se mantuvo?
Se mantuvo. La idea principal fue crear eso: una plaza, un pueblo. Fue la primera propuesta que presentamos, evidentemente mucho más esquemática que la que hemos presentado ahora, porque ha ido madurando muchísimo con las diferentes modificaciones.
También con estudios y trabajos en grupo, en conjunto con los técnicos, con dirección artística, con los grupos. Hemos tratado de convencer y de satisfacer a todos los participantes que también opinan, porque cada gala tiene su idiosincrasia, sus necesidades.
La hemos ido madurando hasta tenerla como está hoy, pero no se separa de la idea inicial. Es más bien cuestión de detalle y de conjunto. La idea se ha mantenido desde el origen.
Como decíamos al principio, has creado escenarios para Las Palmas de Gran Canaria, para Santa Cruz de Tenerife, me imagino que al fin y al cabo son escenarios totalmente diferentes, uno al aire libre, otro en un recinto como la Residencia Ferial de Santa Cruz, ¿es muy diferente o qué ventaja y qué inconveniente tiene por ejemplo el hecho de hacerlo en un recinto cerrado como Santa Cruz?
Hombre, tiene sus pros y sus contras como todo. A diferencia de Las Palmas de Gran Canaria, lo único que me limita es la altura. Es decir, al estar en el exterior, yo normalmente diseño estructuras mucho más altas en los pórticos centrales y en los cuerpos principales de la escenografía.
Aquí en Santa Cruz hablamos de un escenario mucho más panorámico, con muchísimos más metros de boca -casi el doble diría. Estamos hablando de 35 metros frente a los 73 que tenemos este año. Es decir, el doble de boca pero mucho menos alto. Yo he llegado a los 20-21 metros de altura en Las Palmas de Gran Canaria, y aquí en Santa Cruz estamos en 14 metros en total.
¿Tiene sus pros? Pues sí. Trabajar en un interior en febrero -bueno, en enero, que empezamos con el montaje- es mucho más cómodo que trabajar a la intemperie con lluvias y vientos. También hay que tener en cuenta las complicaciones con los materiales y con las estructuras en sí: los pesos, cómo se comporta el viento frente a una pieza exterior... No tiene nada que ver con trabajar en un interior, donde no te afecta la climatología.
Entonces tiene sus pros y sus contras como todo. Y después también está el tema del frío, etcétera. Nos hemos visto en Las Palmas de Gran Canaria en días bastante complicados por estas circunstancias, y en Santa Cruz no tenemos esas complicaciones. Eso sí, tenemos otras limitaciones físicas, pero también otras ventajas físicas.
Entonces, bueno, entre una y otra, como todo en la vida, suma y resta.
Sergio, realmente hace pocos días que has presentado tu escenario, ¿pero ya has recibido algún mensaje que te haya llamado la atención por positivo y por negativo? ¿O no has podido ver nada todavía?
Sí, bueno, no he estado muy atento a las redes porque no me da vida, no solo por el carnaval sino porque tengo también varios proyectos en marcha y he visto cositas, en general creo que ha gustado mucho. Leo muchos comentarios positivos, de que ha gustado y de que es una escenografía muy aceptada por la sociedad y por la población, fácil de entender, muy popular.
Después siempre hay algún comentario que incluso te parece hasta simpático, de gente que mezcla las castañas con las gallinas y no entiende de cómo funcionan estas cosas, pero bueno, yo en general no estoy muy al loro de los comentarios de la gente, pero en general sí diría que es muy positivo, por lo menos en las redes lo que veo y lo que me transmite la gente es que ha gustado bastante. Entonces, por ahí contento.
Lo que sí hemos visto es un escenario más corpóreo a lo mejor que en los últimos años, con mucho más 3D, con muchas más figuras, ¿crees que deberían ser los escenarios así? Porque vemos que en los últimos años tendemos a lo contrario, cada vez más pantallas, más buscar esa interacción con lo tecnológico.
Yo siempre he sido un poco al revés. Siempre en las temáticas también, cuando he hecho Las Palmas, trabajo mucho la escenografía teatral y muy corpórea. Este año, no me acuerdo bien los datos comparados con otros años, pero aquí hablamos de cerca de 1.200 metros cúbicos detallados. O sea, es una barbaridad.
Y además yo apuesto más por la escenografía volumétrica y teatral, más artística, que el simple hecho de poner una pantalla. Entonces, conjugar las dos cosas creo que es fundamental para hacer un producto bien lógico y que tenga juego, que al final no sea todo una televisión.
Hay escenografías que funcionan mejor en directo, hay otras que funcionan mejor en televisión. Y conjugar las dos cosas creo que es la clave del éxito de una escenografía, porque esto no es Eurovisión ni es, ¿qué te digo yo?, los premios Goya. Hablamos de carnaval, hablamos de color, de disfraces, hablamos de diferentes cosas que tienen que estar a la altura del evento en sí.
Y yo siempre he defendido eso, bastantes volúmenes. Entonces, cuando veamos la escenografía ya fabricada y instalada, dará que hablar, porque creo que en Santa Cruz de Tenerife aún no se ha visto una escenografía tan trabajada a nivel de escultura, porque es toda una escultura gigantesca y lleva muchísimos detalles, pero muchísimos.
O sea, está hecha incluso para que el que esté encima del escenario, en la plaza esta que denomino, vea mucho más del que está en butacas. Y entonces todos esos detalles lo va a captar la cámara, lo va a captar la televisión y verán que hay incluso diferentes sorpresas a través de la gala.
O sea, habrá una escenografía que también en cada gala puede que cambien cosas. Entonces eso es muy interesante como resultado
¿Este año se podrán subir todas las candidatas a Reina Adulta en el momento de la proclamación? ¿O va a haber un máximo de candidatas que puedan subir?
Hasta donde yo sé, y se ha debatido mucho sobre esto, porque además me ha condicionado a mí un montón para tener la escenografía bien diseñada, suben todas las candidatas al escenario. Hasta donde yo sé.
No te doy números porque es aún más un tema de dirección artística. Pero los datos que me pasaron y las reuniones que hemos hecho, todos los debates, videollamadas, etcétera, estaban enfocadas a que sí o sí tenían que caber todas las candidatas. Y así ha sido.
O sea, en mis planos, los metros cuadrados que hay en el escenario de plataforma se ha sacrificado incluso muy poco, pero una parte del aforo, para poder cumplir con eso y cumplir también con el aforo. O sea, que se ha hecho bastante un encaje de bolillos entre cumplir con todas las partes.
Porque también hay compromisos con aforo, hay compromisos con las candidatas, hay compromisos con las comparsas, con los grupos en directo, con los coros, etcétera, las murgas. Entonces, intentando cumplir con todas las necesidades de todo, porque no tenemos cuadrados ilimitados, sino que estamos bastante condicionados al centro y al recinto ferial, hemos tratado de encajarlo todo.
No te diría al cien por cien, pero al noventa y siete por ciento de que sí.