El CB Gran Canaria se proclamó campeón de la Copa Isola por 83-74 este domingo en el Gran Canaria Arena tras el empate a 83 del pasado jueves en el Santiago Martín. El duelo en Siete Palmas tuvo un guión parecido al de Los Majuelos ya que los aurinegros empezaron mandando con autoridad en defensa y acierto en el triple hasta plantarse en el descanso con ventaja de 28-38.
Pero de nuevo el paso por vestuarios benefició a los de Lakovic, que remontaron con un gran Nico Brussino -máximo anotador con 17 puntos- y un excelso último cuarto de Ehtan Happ, que acabó con 14 puntos. En el lado canarista destacó Fitipaldo con 15 puntos y buenos porcentajes en el tiro exterior, así como Jaime Fernández, que sumó 12. El subcampeón del mundo, Dusan Ristic, debutó en este amistoso con la camiseta del Canarias y anotó sus primeros puntos. Aún así nada pudo evitar la remontada de un Granca que volvió a demostrar capacidad de reacción y acabó compensando el buen arranque del cuadro tinerfeño.
El Canarias pega primero
El conjutno tinerfeño inauguró su cuenta por mediación de un robo y carrera de Shermadini, seguido de un triple liberado de Salin. Una y otra vez el Granca se encontraba con el hierro, bien fuera los intentos de triple de Bordón y Brussino, o los lanzamientos de Happ bajo el aro. Entonces Fitipaldo apareció con un triple y una bombita, que llevaron el marcador a 0-10.
Landesberg rompió la sequía local pero lanzó pisando la línea perimetral y tan solo sumó dos puntos. Nada más entrar en pista, Ristic encontró abierto a Abromaitis y el de Conneticut anotó el tercer triples para el Canarias. Con cinco puntos seguidos, Lammers trató de adecentar el marcador pero Álex López penetró a tabla y mantuvo la ventaja aurinegra, que Jaime Fernández amplió también entrando a canasta.
En defensa Lammers taponó dos embestidas visitantes pero aún así el Canarias cerró con un 9-21 el primer cuarto.
Ristic se viste de corto
Ferrán Bassas anotó un triple para abrir el segundo episodio pero Vidorreta se guardaba aún varias cartas, como la de Elgin Cook, que al poco de ingresar sumó con un rectificado a tabla. También anotó Ristic, a pase de Jaime Fernández, sus primeros dos puntos como canarista y Abromaitis volvió a clavar un triple en posición abierta.
Durante varios minutos, ambos equipos pecaron de imprecisión y solo parecían capaces de sumar desde el tiro libre. Al borde del descanso, Sangare ganó el rebote en ataque y convirtió, mientras que Prkcin hizo lo propio en el aro contrario. En el intervalo mandaba los tinerfeños por 28-38.
Despierta el Granca
Salió dispuesto a la remontada Dylan Bordón. Primero con asistencia a Happ bajo el aro y recuperando la posesión en defensa para que Salvó definiera en transición rápida. con un dos más uno, Pierre Pelos completó un parcial de 8-0 para los locales pero Fitipaldo, desde la esquina, clavó un triple.
Como en el partido de ida, Brussino volvió a sumar un triple desde su casa pero Fitipaldo, aunque más cerquita de la línea, también anotó de tres. Además del uruguayo, Ristic y Cook, con un buen mate en acción individual, mantuvieron una pequeña ventaja. Pero en el último suspiro del cuarto, los tiros libres de Brussino y, sobre todo, un triple de López de la Torre, cambiaron la situación, con un 57-52.
Happ y Brussino sentencian
Botó varias veces en el aro, pero finalmente entró, en lanzamiento de triple de Salin con el que empezó el último cuarto. Luego Dylan Bordón se enfrentó al muro aurinegro y salió victorioso anotando a tabla. De nuevo abierto, Brussino volvió a sumar un triple lejos de la línea pero Salin aceptó el duelo y acercó al Canarias a solo un punto.
Cuando parecía que el cuadro claretiano se escapaba con un dos más uno de Happ, el canterano Louis Riga volvió a poner el partido en un punto desde el triple. Así discurrieron los últimos minutos, con un Happ acertado y un Canarias que, por mediación de Ristic y Vicedo, volvió a acercarse en el marcador.
Pero Happ seguía de dulce. Robó, se recorrió el campo y anotó. Jaime Fernández reaccionó pero Bassas se lució desde el triple y Brussino, cuando parecía que se había firmado el armisticio en la última posesión, aprovechó para sorprender desde el perímetro y poner el definitivo 83-74 en el marcador.