El CB Canarias silenció este martes la histórica cancha Drazen Petrovic de Zagreb. En su debut en la Champions League 16-17 logró imponerse a uno de los equipos más laureados a nivel europeo, la Cibona, con un gran derroche de garra, oficio y efectividad en cada una de las facetas del juego (57-85) La única nota negativa del choque, la lesión de Grigonis en un tobillo.
El cuadro tinerfeño arrancó con cuatro triples merced a las facilidades en defensa que concedían los locales. Doornekamp, Abromaitis, Grigonis firmaron las primeras canastas (éste último fue el autor de los primeros puntos aurinegros en competición).
El choque estuvo igualado los primeros diez minutos, pero la maquinaria visitante empezó a funcionar a pleno rendimiento desde el segundo cuarto, con unos autoritarios Niang, Bogris y Abromaitis en la pintura (sobre todo el estadounidense) tanto en ataque como en defensa y gran facilidad para acertar desde el tiro exterior.
El equipo canarista puso tierra por medio al término de los primeros veinte minutos y la Cibona ya solo podía jugar a remolque, impotente ante la superioridad canarista. La desventaja era de al menos diez puntos antes del descanso.
Tras la reanudación el equipo de Vidorreta jugó a placer sabedor de que tenía controlado el partido y maniatado al equipo croata. En este sentido, se daban las rotaciones y sin despeinarse ampliaba el marcador con el paso de los minutos, sin conceder facilidades en defensa siquiera. Tal efectivo fue en la retaguardia que la Cibona no alcanzó los 50 puntos hasta el minuto 35 de partido.
Así las cosas, brillante debut en competición europea del equipo tinerfeño, con Abromaitis como máximo anotador (17), Doornekamp máximo reboteador (9) y San Miguel máximo asistente (7), sumando así un histórico pleno de triunfos en partidos oficiales. El próximo choque de Champions League será el próximo miércoles ante el KK Mornar de Montenegro con el Santiago Martín como escenario.