Situación ligeramente crítica para el CD Tenerife. Debe sumar tres puntos que sirvan de oxígeno tras un exigente y movido duelo de Copa del Rey, para evitar así alejarse del objetivo principal, que no es otro que ocupar uno de los dos primeros puestos a final de temporada.
La historia está del lado del representativo, dado que solo ha perdido en el feudo rojiblanco una vez (2005-06) ante un conjunto que llega con urgencias, pero motivado y con nuevos bríos, al encuentro de este domingo (19 hora canaria).
EL ÚLTIMO PRECEDENTE, DE GRATO RECUERDO
Los blanquiazules se llevaron los tres puntos el curso pasado en una soleada mañana almeriense (0-1) gracias a un solitario tanto del ahora jugador de Las Palmas, Ximo Navarro (él no quería), cuando solo restaban diez minutos de partido. La victoria colocaba al representativo en la octava posición, a tres puntos del líder, con cinco jornadas disputadas.
El cuadro isleño ha sido capaz de sumar en sus últimos cuatro duelos en suelo almeriense, dos victorias (ambas por 0-1) y dos empates (2-2 y 1-1). El mencionado empate a dos tantos se produjo hace dos campañas, con tantos blanquiazules obra de Nano y un gol en propia meta del Almería.
El CD Tenerife solo ha perdido en una de sus ocho visitas a Almería | Curro GarcíaEN PRIMERA DIVISIÓN TAMBIÉN 'RASCÓ' ALGO POSITIVO
El equipo entonces dirigido por José Luis Oltra en la 2010-11 sumó un punto (1-1) gracias a un tempranero tanto de Juanlu Hens, que posteriormente neutralizaría Reyes. A final de temporada los blanquiazules terminarían perdiendo la categoría y los de Juanma Lillo lograrían la permanencia con cierta suficiencia.
LA ÚNICA DERROTA, HACE DOCE TEMPORADASEl CD Tenerife caía en Almería (2-0) en febrero de 2006, también en Segunda. Los de David Amaral, con Cristian Álvarez, Jesús Vázquez, Ricardo y compañía en el once inicial fueron testigos de una de las diecisiete derrotas sufridas en una campaña en la que acabaría en un paupérrimo decimoctavo puesto. Ha llovido desde entonces, y los de Martí buscarán con ahínco ampliar la racha positiva en el Juegos del Meditarráneo. No les queda otra.