El CD Tenerife ante la SD Huesca, la prueba más exigente

El CD Tenerife se mide ante la SD Huesca en la prueba más exigente de lo que va de temporada en el Heliodoro Rodríguez López

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Luis Milla CD Tenerife ante el CF Fuenlabrada | @jacforografo
Luis Milla CD Tenerife ante el CF Fuenlabrada | @jacforografo
Acabados en decepción todos los exámenes en el Rodríguez López ante equipos de perfil más conservador (Oviedo, Fuenlabrada o Extremadura), el tinerfeñismo confía en que la exigente prueba de este sábado, en teoría, la más difícil de todas, acabe con resultado victorioso y quiebre una serie fatal de descalabros en casa.

El Huesca podría pasar perfectamente por "una selección de jugadores de Segunda", como así la definieron esta semana con acierto desde la acera blanquiazul. Okazaki, Juan Carlos Real, Cristo González... Un arsenal de opciones que adiestra Michel, uno de los técnicos más codiciados en verano y que eligió finalmente enrolarse en la candidatura oscense al ascenso. No hay dudas de la ambición azulgrana y de su intención de instalarse en una de las dos primeras plazas, si bien los de El Alcoraz han tardado en engrasar la maquinaria. Llegados a este punto, posiblemente visiten el Heliodoro en su mejor momento, tras firmar su triunfo más convincente de la temporada (ante el Elche) y mostrar el perfil más vistoso de todo su repertorio.

En cambio, el proyecto tinerfeñista apenas ha experimentado avances en las últimas semanas. López Garai argumenta que sí percibió mejoras en Anduva, donde los suyos salieron con un empate a trancas y barrancas. En todo caso, insuficiente para acabar con la sequía de triunfos y la mala racha (van cinco jornadas sin vencer). Los isleños llegarán a la cita del sábado al filo de los puestos de emergencia y obligados a ofrecer su mejor versión para tumbar al Huesca.

El consuelo -y la esperanza- es que no es probable que se encuentren con un rival timorato, ni que venga a encerrarse. Los altoaragoneses empuñarán su estilo y defenderán desde la posesión del esférico. Un escenario del que podría sacar ventaja el Tenerife, que mantiene hasta el final la duda de Bermejo; y que suma las bajas de Aitor Sanz y probablemente la de Alberto. Toca reinventarse para devolver la alegría a la grada justo ahora que el calendario empieza a empinarse. Un reto, pero también una oportunidad.

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