La imagen del Heliodoro Rodríguez López en los últimos partidos no ha sido nada buena. Ante la AD Alcorcón, los huecos en las gradas fueron más que nunca. Pese el club anunciar tras finalizar la campaña de abonados que se había llegado a los 11.000 abonados, el último partido disputado por el equipo tinerfeñista tuvo 8.178 espectadores en el recinto de la calle de San Sebastián.
Los malos resultados como local, tan solo una victoria en toda la primera vuelta, no solo condena al equipo entrenador por Rubén Baraja a la zona baja de la clasificación sino que vacía, poco a poco, un estadio que no ruge como en tiempos pasados.
Como ya ocurrió ante la AD Almería, la afición volvió a dirigirse al palco, al grito de "Concepción dimisión". Un ambiente muy crispado y que es reflejo de la mala gestión en los últimos movimientos del presidente tinerfeñista y su Consejo.
Los malos resultados como local, tan solo una victoria en toda la primera vuelta, no solo condena al equipo entrenador por Rubén Baraja a la zona baja de la clasificación sino que vacía, poco a poco, un estadio que no ruge como en tiempos pasados.
Como ya ocurrió ante la AD Almería, la afición volvió a dirigirse al palco, al grito de "Concepción dimisión". Un ambiente muy crispado y que es reflejo de la mala gestión en los últimos movimientos del presidente tinerfeñista y su Consejo.