Los jugadores del CD Tenerife celebran el pase ante el Zamora./
Los jugadores del CD Tenerife celebran el pase ante el Zamora./

Zamora 0-0 (1-3) CD Tenerife: De penati... y gracias

Un partido que se repite un día tras otro, un Tenerife que se diluye, que no da la impresión de que ostenta una categoría profesional

J.J.P.

Actualizada:

Otro partido de Copa del Rey y otra prórroga. Este Tenerife no tiene recursos siquiera para solventar un partido de forma cómoda ante un conjunto de inferior categoría, como el Zamora. El rival se limitó a tratar de contener algún avance tímido de los visitantes y a conseguir acercarse tres veces a la meta de Salvi Carrasco, aunque no creó apenas jugadas de peligro para la meta del conjunto entrenado por Pepe Mel.

Y por si era poco ya la mala racha de juego, de fútbol, de resultados; en fin, de todo en esta temporada, cuando se habían jugado 16 minutos de la prórroga Josep Gayá protestó al árbitro una decisión de forma airada y el Tenerife se quedó con diez jugadores. Faltaban 14 minutos y había que aguantar, al menos, hasta los penaltis.

En la última baza, los tinerfeñistas se mostraron más acertados, Salvi Carrasco paró el lanzamiento de Roni y esto puso ya las cosas favorables para un Tenerife que el 4 de enero se enfrentará a un Primera en el Heliodoro Rodríguez López.

La copa no es prioritaria

Pepe Mel ”mandó” un mensaje claro antes de comenzar el partido. Incluso antes de viajar hacia Zamora. La convocatoria demostró que esta competición no es la prioridad del club, dada la mala situación clasificatoria del conjunto blanquiazul en la Liga Hypermotion. Les confieso que me costó mentalmente situar a los futbolistas en la alineación, con tres centrales que han tenido escaso protagonismo en liga y cuando han formado parte del “once” no han demostrado el oficio que obligaría a un jugador del fútbol profesional.

Y además, completó el equipo con futbolistas que apenas han contado en Liga y otros que tienen colgado desde hace tiempo el cartel de “no cuenta” y que se espera que salgan en el mercado invernal. Casos como Bodiger, Yanis, Cantero, incluso, Marlos Moreno. Un batiburrillo de alineación, con los canteranos Teto y Dani Fernández, que poco a poco han ido perdiendo protagonismo desde la llegada de Mel, que “anunció” una revolución al confiar en la cantera hasta que en el último encuentro liguero ya no contó sino con el “intocable” Aarón Martín, el “invento” del entrenador madrileño.

Nada de nada en los primeros veinte minutos de juego. Un Tenerife sin claridad ninguna para llegar en jugada a la zona de peligro del Zamora, con cuatro atrás porque Gayá se situó en el lateral derecho y Mellot cambió hoy de banda para jugar como lateral por la parte izquierda, con Juande -que regresaba después de muchos partidos- y  Rubén Alves.

Fue al límite de ese minuto 20 cuando una internada de Cantero por la derecha llegó al punto de penalti, donde Yanis trató de rematar de tacón y su lanzamiento se fue a la derecha de la meta defendida por el ex del Castilla, Diego Altube, que en esta fase estuvo tranquilamente situado debajo de sus palos, sin tener que intervenir apenas.

Mala sensación

Yanis, “presunto” centro delantero, se pasó la primera parte en la zona media de la cancha zamorana, se supone que en busca de un balón que pudiera servirle para acercarse a portería, mientras el centro del campo blanquiazul no atinaba a dar tres pases seguidos, lo que ocasionó que el Zamora no pasase apuros, aunque tampoco tuvo una sola ocasión frente a Salvi, si exceptuamos un lanzamiento de falta de Kike que se marchó a la izquierda del meta, sin excesivo peligro.

Antes de que la primera parte tocara a su fin, Pepe Mel puso a calentar a dos futbolistas para arreglar la mala sensación del equipo hasta entonces. Ethyan y Dylan, dos canteranos de los que siempre ha hablado de forma positiva el entrenador madrileño, eran junto a Alassan, lo poco que el Tenerife dejó en el banquillo, para tratar de revolucionar el juego, dada la baja por sanción de Enric Gallego y las ausencias por decisión técnica de otros futbolistas habituales titulares, que se quedaron en la isla.    

Sin embargo, al inicio de la continuación no hubo alteraciones en ningún equipo, mientras Mel mantenía calentando a los dos futbolistas mencionados, junto a Alassan y al “desaparecido” Álvaro Romero, que regresó a una convocatoria después de una larga lesión.

Miedo en el cuerpo

Cinco minutos habían pasado de esta fase para que el Zamora pusiera el miedo en el cuerpo de los tinerfeñistas, cuando Borrego se fue por la banda izquierda, entró en el área por línea de fondo y envió atrás, para que Mancebo la estrellara en el palo de la meta de Salvi Carrasco. La primera clara de los castellano-leoneses en todo el partido.

Y fue un aviso, porque el Zamora vio que el Tenerife no le apretaba, sobre todo en la zona ancha del terreno, y se fue arriba para buscar la ocasión que le adelantara en el tanteo, y a punto estuvo de conseguirla ante la defensa titubeante del conjunto visitante.

Un partido que se repite un día tras otro, un Tenerife que se diluye, que no da la impresión de que ostenta una categoría profesional, algo que se da una y otra vez a pesar de los cambios de “cromos” y de esquemas propuestos por el entrenador del Tenerife. Otro partido para olvidar o quizás todo lo contrario, para tratar de encontrar una solución a este descalabro que sufren los blanquiazules en este nefasto año.

Aunque Alassan tuvo una oportunidad, la única, frente a la salida de Altube, todo hacía presumir que el partido nos iba a llevar al sufrimiento de una nueva prórroga, como ya ocurrió en el anterior choque copero. Entonces, los blanquiazules sacaron adelante la eliminatoria en el tiempo suplementario ante el Alfaro, con goles de Sergio González, en los minutos 113 y 121. Hoy, el capitán tinerfeñista vio el partido desde el sillón de su casa por decisión de Pepe Mel.  

Más de lo mismo

En la prórroga, más de lo mismo; bueno, empeorado por la expulsión de Gayá, lo que llevó a los zamoranos a intentar algún ataque que les diera el triunfo y Tresaco a punto estuvo de lograrlo a los 114 minutos de juego. Con un Zamora que ya pedía aire por señas, el Tenerife no parecía mucho mejor físicamente, lo que hizo que las cosas se pudieran desnivelar, sobre todo, por parte local.

No fue así, se llegó a los penaltis y entonces el equipo de superior categoría hizo lo que debía. Salvi Carrasco fue fundamental al detener uno de los lanzamientos y sus compañeros acertaron para poner al Tenerife en la siguiente ronda. Otro partido espantoso del Tenerife. Otro paso más hacia el abismo deportivo al que se asoma el club en los tiempos actuales. 

Ficha Técnica:

Zamora CF:  Altube; Gorjón (Alvarez, min.118), Carlos Gutiérrez, José Carlos (Nieto, min.63), Julen (Campabadal, min.63); Guille Macho, Mancebo (Roni, min.77), Carlos Ramos, Speljak (Tresaco, min.104); Kike Márquez y Borrego (Clavería, min.80).

CD Tenerife: Salvi Carrasco; Gayá, Juande, Alves, Mellot; Cantero (Dylan, min.55), Bodiger, (Guerrero, min.120) Teto, Marlos (Alvaro Romero, min.77); Yanis (Ethyan, min.55) y Dani Fernández (Alassan, min.55).

Árbitro: Miguel González Díaz, del Comité Asturiano. Mostró cartulinas amarillas al entrenador local Juan Sabas (min.15), a Guille Macho (min.27), Kike Márquez (min.46), Campabadal (min.70), Teto (min.72), Bodiger (min.84) y Roni (min.94) y Expulsó a Gayá, por doble amonestación (min.106).

Penaltis: Carlos Ramos (fuera), Alvaro Romero (gol),Roni (para Salvi), Ethyan (al palo), Guille Macho (gol), Alassan (gol), Kike Márquez (fuera), Guerrero (gol).

Estadio: Ruta de la Plata, con capacidad para 7.813 espectadores. Presenciaron el partido unos 3.000 aficionados, entre ellos un escaso grupos de seguidores blanquiazules.