El CV Haris perdió en el Santiago Martín ante el Stuttgart por 0-3 (19-25, 15-25, 18-25) en el primer partido de CEV Champions League del nuevo año. El conjunto tinerfeño se vio superado por el amplio repertorio del actual líder de grupo y de la Bundesliga que bajo el liderazgo de Rivers, MVP del partido, invalidó el esfuerzo de un equipo local muy voluntarioso y con una sobresaliente Patricia Llabrés.
Comenzó concentrada la escuadra lagunera, dominando desde el saque y cubriendo las puntas, si bien sufría para generar en la zona central y defender ante los bravos ataques de Marie Schoelzel, hasta que se llegó a la igualada a 9. Pese a los intentos visitantes de distanciarse en el marcador, el trabajo de las locales, con Patricia Llabrés a la cabeza, mantenía el pulso, valiéndose también de las oportunas peticiones de videoarbitraje por parte del técnico local. Aún así, las jugadoras comandadas por María Segura acabaron imponiendo su guión de partido y, pese a un arreón comandado por Patricia Aranda, el Stuttgart cerró el primer set por 19-25.
El líder impone su ley
El arranque del segundo set fue peor para las locales, sobre todo con problemas en la recepción que supieron aprovechar las alemanas. El Haris necesitaba de una acción que le diera la confianza suficiente para acechar en el marcador. Un bloqueo de Daysa Delgado secundado por un remate de Belly y un punto directo de Julie dieron esperanzas a la hinchada del Santiago Martín, si bien la brecha en el marcador continuaba siendo amplia.
El técnico visitante, Tore Aleksandersen, aprovechó la superioridad para darle protagonismo a la segunda unidad y, aunque Aranda y Julie imprimieron velocidad, el juego de las locales se acabó diluyendo tras una falta en la red y acabaron cediendo por 15-25.
El inicio del tercer y último set vino fue más igualado pero la aparición de Bongaerts desequilibró la balanza con un parcial de 1-6. Con las titulares sobre el taraflex, el Stuttgart fue un equipo mucho más solvente. Mientras, al otro lado de la red, Meg Wolowicz intentaba dar la réplica con remates a una pierna que valieron varios puntos a las locales que, aunque nunca se rindieron, acabaron sobrepasadas por la superioridad del líder alemán, que se anotó también el episodio definitivo por 16-25.