El coste laboral para las empresas canarias sube 6,3 puntos en el primer trimestre del año

El importe medio en el Archipiélago, por asalariado y mes, se sitúa en 2.468,76 euros, el segundo más bajo de todo el país | El salario medio en 2022 en las Islas fue de 1.573 euros al mes

Martín Alonso / Marcos Moreno

Guardar

El sector servicios, donde más aumentan los costes laborales en Canarias. / AH
El sector servicios, donde más aumentan los costes laborales en Canarias. / AH

Hace unos meses, en uno de sus perfiles en redes sociales, una empresaria canaria mostró detalles de la nómina de uno de sus trabajadores para poner en valor lo que una compañía española —mediana o pequeña —debe pagar en concepto de cargas laborales y fiscales por un asalariado: el empleado —según aparecía en el documento— percibía un líquido de 1.397,30 euros, pero el importe total que abonaba la empresa ascendía a 2.221,82 euros

El ejemplo de esta empresaria canaria sirve como una más entre las quejas que la patronal ha trasladado por este concepto en los últimos tiempos. Cepyme, en diciembre del año pasado, apuntó que la suma de cotizaciones y otros costes laborales hace que el coste mínimo de contratar a un empleado sea, para las pequeñas empresas, el equivalente al 136% del salario mínimo. Sólo tres países de Europa —Lituania, Francia y Bélgica— tienen un coste mínimo de contratar a un trabajador superior al de España y en otras 20 naciones del continente las cotizaciones que debe pagar la compañía son al menos 10 puntos porcentuales más bajas que en nuestro estado.

Primer informe de 2023

El último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el coste laboral, referente al primer trimestre del año y que fue publicado el viernes pasado, señala que la tasa de variación anual ha aumentado —de media— un 6,2%. El incremento en el caso de Canarias, entre todas las comunidades autónomas, está ligeramente por encima: un 6,3% para situarse por trabajador y mes en 2.468,76 euros —el segundo más bajo de todo el país, sólo por encima del índice de Extremadura (2.260,38 euros)—. En las Islas, el salario medio en 2022 era de 1.573 euros al mes.

Si se atiende al crecimiento anual del coste, Baleares (11,2%), Navarra (7,8%) y Comunidad de Madrid (6,9%) presentan las más elevadas, mientras que Asturias (1,3%) y Cantabria (3,8%) registran los menores aumentos. Por asalariado y mes, la Comunidad de Madrid (3.513,35 euros), País Vasco (3.334,10), Cataluña (3.135,40) y Navarra (3.037,05) son las únicas regiones por encima de los tres mil euros mensuales y de la media nacional (2.897,87).

Explicación compleja

Analizar por qué en Canarias los costes laborales han subido ligeramente por encima de la media y cuál es la razón para que se den estos tipos de incrementos es complejo. No hay una única respuesta que ofrezca la clave para entenderlo, pero sí existen varios motivos que explican los datos publicados este lunes por el INE. Atlántico Hoy se ha puesto en contacto con economistas y empresarios que han ofrecido sus observaciones sobre este fenómeno.

Trabajador de una pyme industrial durante su jornada laboral. Siniestralidad/ UNSPLASH
Trabajador de una pyme industrial durante su jornada laboral. / UNSPLASH

Juan José Hernández, secretario técnico del Colegio Oficial de Economistas de Tenerife, pone el foco en la subida del salario mínimo (SMI). Cuenta que hay muchos trabajadores canarios cobrándolo y al haber aumentado hasta los 1.080 euros los costes salariales se han vueltos mayores. “La bolsa de gente que recibe el salario mínimo en Canarias seguramente es mucho más grande que en el País Vasco o Madrid”, afirma.

'Efecto acordeón'

La cualificación de los empleados también es importante para entender lo que ha ocurrido. “En una comunidad donde la cualificación es muy baja una subida del salario mínimo a los 1.080 euros se nota”, indica el economista. Los sectores donde más se percibe son, por ejemplo, el agrícola o el comercial.

Hernández usa un término que suele emplear para comprender lo que ocurre al subirse el salario mínimo: el efecto acordeón. Lo justifica al narrar que si el SMI es mayor, “el siguiente escalafón laboral cualificado va a querer cobrar más”. “Son incrementos indirectos que se producen”, agrega.

La inflación

El SMI no es el único frente al que atender, también se debe tener en cuenta la inflación. “A causa de la inflación se ha producido una negociación para la subida de los salarios vía convenios colectivos y vía presión social”, sentencia Hernández. Además, reflexiona sobre que “el empresario ha tenido que abrir la mano”.

El secretario técnico del Colegio Oficial de Economistas de Tenerife emplaza a no olvidar tampoco “los incrementos en los costes de la seguridad social que hemos vivido”. “La fiscalidad del trabajo ha subido”, atestigua.

Mejorar en productividad

José Manuel Corrales es profesor de Economía y Empresa de la Universidad Europea. Para él, este incremento de los costes laborales “no es para estar preocupados”, porque “la inflación ha subido bastante más de lo que han subido los costes laborales”. Considera que es más importante hacer un esfuerzo por mejorar la productividad, ya que “es el reto más importante que tiene el mercado de trabajo español y canario”. Incide en lo fundamental de “cualificar mejor a la mano de obra y a los empresarios”.

Corrales tiene claro que la subida de los salarios han jugado un papel importante para que suban los costes laborales. “Hay empresas que han incrementado un 80% sus beneficios, mientras que los salarios lo han hecho un 3% en el 2022 y para este año se ha pactado un incremento del 4% en el acuerdo para el empleo y la negociación colectiva”, manifiesta.

Menos jornada laboral

La reducción de la jornada laboral es otro de los motivos porque “provoca una subida de los costes laborales”. Aunque la mayor preocupación para Corrales es “el problema con la productividad que hay en Canarias y en España”. “Eso se debe a que tenemos un trabajo no especialmente cualificado”, declara.

“No es lo mismo un trabajador que realice 100 productos a la hora, que uno que es capaz de sacar 150 servicios. Hay más productividad en el segundo y el salario compensa los productos y los servicios. Hay un encarecimiento de los costes laborales si existe una productividad baja, hay una relación inversa”, desarrolla.

Trabajador de la construcción. / Unsplash
Trabajador de la construcción. / UNSPLASH

Corrales ve en este pequeño aumento de los costes laborales un reflejo de la disminución de la precariedad laboral. “El mercado de trabajo ha mejorado con la reforma laboral, se ha incrementado la contratación indefinida, que antes solo ocupaba el 3% y ahora el 45%”, esgrime.

Visión de los empresarios

El sector empresarial es el que vive más de cerca, junto a los empleados, todo lo relativo a la subida de los costes laborales. Enrique Hernández, presidente de la Plataforma de Empresarios de Canarias, afirma que “contratar se ha convertido en un artículo de lujo”. “Estamos condenando el futuro de mucha gente que está fuera del mercado laboral y no va a entrar porque este incremento de los costes laborales aumenta el costo de las indemnizaciones”, apostilla.

Coincide con los economistas en que existe un problema con la productividad, aunque él prefiere llamarlo eficiencia. “En las Islas somos eficaces porque hacemos las cosas, pero los recursos que gastamos para sacarlas adelante son muy grandes”, aclara.

"¿Cómo vamos a subir los salarios"

Hernández opina que los costes laborales son “abusivos”, porque la administración pública no tiene empatía con el sector empresarial. “Contratar tendría que estar premiado porque estamos generando riqueza y dando oportunidades a familias”, exclama.

Tampoco cree que se haya acabado con la precariedad laboral. “Antes eran contratos temporales, ahora indefinidos y se está disparando un 144% los despidos en periodo de prueba. Porque no hay flexibilidad en los contratos, no están adecuados a la realidad que estamos viviendo”, reflexiona.

El empresario no comprende cómo es posible que sea la empresa quien pague todos los gastos como los EPI, la seguridad y salud en el trabajo, etc. “Tiene que ser preocupación de la administración pública”, indica. “Si todos los gastos los pagamos las empresas, ¿cómo vamos a subir los salarios?”, culmina.