El aumento de parques de energía renovable se mantiene constante en la isla de Tenerife, sobre todo en Arico, el municipio que más se ha quejado del crecimiento de aerogeneradores en sus terrenos. Pese a las quejas, el cambio del sistema eléctrico a razón de la descarbonización es necesaria en el archipiélago, que en los últimos años ha visto ligeramente estancada la producción energética renovable, pero que cada vez coge más fuerza. La última en recibir el aval del Gobierno de Canarias para la puesta en marcha de dos parques eólicos es la empresa tinerfeña Estudio Leyvi, que instalará 11,75 megavatios (MW) en el municipio.
Se trata de dos parques situados cerca de la autopista de Arico. Por un lado está la ejecución del Parque Eólico Brisas del Mar, de 4,7 MW. Cerca de la TF-629, la empresa construirá dos aerogeneradores y una línea de evacuación de la energía para lo que se prevé una inversión 6.204.000 euros. Tal y como indica la aprobación del proyecto, la puesta en marcha generará 33 puestos de trabajo en la fase de construcción y 9 puestos de trabajo en la fase de mantenimiento y explotación.
Por otro lado, el Gobierno ha aprobado la ejecución del proyecto Parque Eólico Abades, de 7,05 MW. En este caso, geográficamente cercano al anterior, se trata de tres aerogeneradores y otra línea de evacuación, con una mayor inversión, de 9.306.000 euros. Para la puesta en marcha se prevé generar 49 puestos de trabajo en la fase de construcción y 14 puestos de trabajo en la fase de mantenimiento y explotación, según el documento.
La empresa tiene previsto que, en relación a la anterior instalación, el parque eólico sea aún mayor. El Parque Eólico Abades no estará solo, irá acompañado de el Abades 1, con tres aerogeneradores, y del Abades 2, con dos aerogeneradores. En su conjunto, se trata del Parque eólico Tagoro Risco Blanco que tendrá una capacidad de generación de 16,45 MW, que ya en el documento de autorización administrativa reflejaba una inversión de 21.211.266,09 euros.
Debate en Arico
La puesta en marcha de este tipo de parques, si bien es positivo a la hora de afrontar la descarbonización energética (la energía canaria sigue dependiendo en su mayoría del petróleo), genera debate en el municipio por la ordenación del territorio. Sin duda Arico es el municipio con más parques renovables de Tenerife. Una situación criticada en numerosas ocasiones por el gobierno local.
El último caso que ha generado el malestar del Ayuntamiento es la intención de la Autoridad Portuaria, en concreto de Parque Eólico Marino Granadilla, S.L de la construcción del primer parque eólico flotante de Tenerife, que quiere poner en marcha en Granadilla. La empresa solicitó la ocupación de 619.750 metros cuadrados de lámina de agua en zona II, 5.300 metros cuadrados de lecho marino en zona II y 1.375 metros cuadrados de subsuelo. Sin embargo, desde el Ayuntamiento han presentado alegaciones contra la construcción, pues demandan un plan de ordenación de las renovables.
Pero no es el único caso que ha generado malestar en el gobierno local. El parque de La Morra, deslegitimado por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) y vuelto a legitimar recientemente por el Gobierno de Canarias, también ha creado conflicto. Tal y como denunció el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Arico, Andrés Martínez (PP), a Atlántico Hoy, “agotaremos la vía administrativa y también emprenderemos acciones legales”.
Dos nuevos parques en Arico
Tan solo hace falta mirar el visor del Grafcan para descubrir el alto número de parques de energía renovable que se encuentran en la zona. Y todo parece indicar que seguirá en aumento, ante la obligación europea de incrementar la producción de renovables.
La inversión de estos dos parques ha sido adjudicataria de la convocatoria de ayudas EOLCAN2 del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía IDAE, que obliga a la finalización de las obras y su puesta en funcionamiento antes del 31 de diciembre de 2022.
Tras la aprobación, el Gobierno ha ordenado la modificación del Plan Insular de Ordenación de Tenerife. A su vez, tal y como informa el documento se puede interponer recurso potestativo de reposición ante el Gobierno de Canarias en el plazo de un mes a contar desde el día siguiente a su notificación o publicación.