Más de 800 kilos de castañas. Es lo que han robado en menos de dos semanas a agricultores de las medianías de la isla de La Palma. Un hecho que no es de extrañar para ellos, ya que denuncian sufrir esta situación desde hace más de una década.
Desde la Asociación de Agricultores Tradicionales y Gestión Agroforestal Aurelio Acevedo explican que estos amigos de lo ajeno ya han entrado "a casi todas las fincas" de estas zonas causando roturas en los cercos, a lo que se suma una "desorganización por parte de las administraciones públicas" así como una "falta de medios" de los cuerpos de seguridad. En esta zona, según se quejaban el pasado año, se sustrajo una tercera parte de la cosecha, que son unos 1.500 kilos.
“Estamos desamparados”
Daniel Mentrel, presidente de la asociación palmera, explica a Atlántico Hoy que un año más llega el otoño y la temporada de castañas, pero que a pesar de ello quienes trabajan este fruto "son quienes menos cosechan". Afirma que les han llegado a robar 800 kilos en menos de dos semanas, además de 500 kilos de manzanas. "Las administraciones, tanto a nivel local como autonómico, no han movido nada. Nos vemos solos", asegura.
De esta manera alerta de que "o se toman las medidas oportunas, o lo poco que se está trabajando el castaño se va a abandonar". Crítica que mientras
"el Cabildo ha encargado un plan de gestión del castañero por valor de 60.000 euros, quienes se dedican a ello no pueden trabajar por las oleadas de robos que se llevan denunciando cerca de una década”, dice. Según explican los agricultores se ha acudido "a todas las instancias y todos los años pasa lo mismo" porque el monte "está lleno de gente metiéndose en fincas privadas".
20 años
Un caso que tampoco es nuevo para otras islas, como Tenerife. José Zoilo, gerente del Grupo de Acción Rural de Tenerife, apunta que sigue siendo uno de los mayores problemas del sector y que en la isla llevan más de 20 años sufriendo, siendo probablemente uno de los problemas más recurrentes del cultivo.
Para él lo que falla realmente es la concienciación. “Además de los que roban, también hay gente que quiere creer que los castañeros no tienen dueño, que son un bosque, y eso no es cierto. Aquí no había bosques de castaños antes de la conquista, el castañero se trajo después, y se plantó para un uso, por lo que los castañeros siempre han tenido dueño. En relación a eso, desde el Cabildo se sacó el año pasado una campaña tratando de concienciar a la población”, cuenta.