La Autoridad Portuaria de Las Palmas trabaja para que el Puerto de La Luz pase de nivel 2 a nivel 1 en 2025, un cambio que permitiría acceder a mayores recursos económicos y humanos para gestionar de manera óptima el continuo incremento del tráfico portuario. Así lo anunció este viernes la presidenta de la Autoridad Portuaria, Beatriz Calzada, durante el brindis navideño con los medios de comunicación.
Calzada calificó el balance de 2024 como "muy positivo", subrayando el crecimiento en la llegada de barcos motivado, entre otras razones, por la crisis del Mar Rojo. Este incremento ha puesto en evidencia el "músculo" del puerto, aunque también la necesidad de actualizar su nivel operativo para garantizar una gestión eficiente.
“El Puerto de La Luz tiene las fortalezas necesarias para asumir mayores retos, pero requiere recursos acordes a su actividad”, explicó Calzada, quien señaló que el cambio de nivel deberá ser aprobado por el Consejo de Ministros.
Objetivos para 2025
Entre los principales desafíos para el próximo año, la presidenta destacó tres: descarbonización, para continuar con la electrificación del puerto, un proyecto con una inversión de 109 millones de euros que busca reducir el impacto ambiental de las operaciones portuarias; atracción de nuevos tráficos, para consolidar las relaciones comerciales con América Central y del Sur, promoviendo su conexión con África como alternativa a las barreras comerciales impuestas en otros mercados; y formación profesional, para impulsar la Formación Profesional Dual y la capacitación profesional para ofrecer oportunidades a los jóvenes y reforzar la plantilla del puerto con la incorporación de más ingenieros, como ha solicitado el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos.
Crítica al ayuntamiento
Otro de los proyectos destacados será la organización de jornadas informativas sobre protocolos de actuación ante vertidos en el puerto, en colaboración con Capitanía Marítima. Estas jornadas, dirigidas a ayuntamientos y periodistas, buscan disipar alarmismos y mejorar la respuesta ante posibles incidentes.
“Es necesario entender los protocolos para evitar decisiones precipitadas como el cierre de la playa de Las Alcaravaneras tras el último vertido, una medida tomada por prevención pese a que los técnicos no lo consideraban necesario”, señaló Calzada, insistiendo en la importancia de la información adecuada.
Con estos planes, el Puerto de La Luz se posiciona para afrontar un 2025 marcado por el crecimiento sostenible, la innovación y su compromiso con la excelencia operativa.