El tesorero de Mediolanum Mario Rapanello apuesta por el valor añadido generado en Canarias

Rapanello animó a los presentes a generar valor añadido ya que, gracias a la era digital, “todo ha cambiado” y no hace falta estar en el continente para producir calidad

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Un momento de la charla de Mario Rapanello en la Universidad Europea de Canarias./
Un momento de la charla de Mario Rapanello en la Universidad Europea de Canarias./

Con motivo de su visita a Tenerife la semana pasada Atlántico Hoy pudo conversar con el responsable de Tesorería y Mercado de Valores del Banco Mediolanum, Mario Rapanello, quien ofreció una charla sobre geopolítica en la sede de la Universidad Europea de Canarias de la capital.

Rapanello animó a los presentes al creer que desde el Archipiélago se puede generar un gran valor añadido ya que, gracias a la era digital, “todo ha cambiado” y no hace falta estar en el continente para producir calidad, aunque sea desde una isla como Tenerife, alejada de Europa. Por ello invitó a los asistentes a “desarrollar valor como empresarios” en Canarias y no dejarse amedrentar por las circunstancias.

En este sentido puso como ejemplo el parón mundial de la economía debido al COVID, que detuvo el mundo durante semanas pero, después, “en un mes nos hemos recuperado”.

Economías mundiales frente al COVID

Durante su charla el tesorero de Mediolanum habló sobre cómo se han recuperado las diferentes economías del mundo frente a la pandemia.

Por un lado, Estados Unidos se ha recuperado impulsado desde le Reserva Federal una subida de tipos de interés, posible gracias a que el 80% de la economía del país se basa en el consumo interno, lo que le hace "menos frágil” a las fluctuaciones internacionales. Según Rapanello, en Estados Unidos “el deporte nacional es el consumo”, un hecho que blinda su economía. Europa, por contra, se ve por ahora incapaz de hacer un subida agresiva de tipos.

Todo ello en un contexto en el que el 82% del transporte de mercancías mundial se realiza por barco, y el dominio de los mares es de los norteamericanos desde que los ingleses cediesen dicho dominio en el contexto de la Segunda Guerra Mundial.

En el extremo contrario se encuentra China, cuya economía se basa en un 75% en las exportaciones, lo que coloca al país asiático en una peor posición a la hora de afrontar crisis como la generada por el coronavirus.

Transformación del modelo

Es por ello que el gobierno chino ha iniciado un plan que han llamado “el de los cinco años” con el que pretende acercar su economía al modelo estadounidense, fortaleciendo el consumo interno a través de la financiación de proyectos en zonas rurales, muy pobres en comparación con las grandes urbes del país.

Todo ello con el fin de “transformar” la originaria Ruta de la Seda y afianzar el consumo europeo, más interesante que el de países en desarrollo por su mayor nivel de sofisticación.

Los conflictos derivados de la guerra en Ucrania hacen que sea necesaria una reconfiguración de los equilibrios en el Viejo Continente, dominados por los intereses energéticos que en la actualidad dominan la geopolítica mundial, como muestra la dependencia de Alemania del gas ruso que antes pasaba por Ucrania y que en la actualidad busca una nueva vía por el norte, si bien aun no se encuentra al 100% de su funcionamiento.

Titulares vs. Tendencias

“La línea del progreso siempre crece. Desde 1960, el PIB mundial nunca ha dejado de crecer”, aseguró Rapanello como síntesis de su argumento, por lo que un considera que un buen estratega transforma titulares en tendencia de largo plazo, aunque reconoció que ni siquiera el analista más avispado es capaz de predecir cuánto durará un ciclo económico determinado.

Lo positivo, finaliza el tesorero del que es el banco más solvente de España según el Banco Central Europeo, es que las bolsas de cada país reflejen fielmente su economía, como es el caso de Estados Unidos y Japón, lo que les convierte en el valor más seguro para invertir en el largo plazo, pues “a la larga siempre ganan”.