El proyecto de la planta de gas natural licuado (GNL) en el Puerto de La Luz y de Las Palmas ha llegado a su fin tras la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) negativa realiza por los técnicos del Gobierno de Canarias. La presidenta de la Autoridad Portuaria, Beatriz Calzada, ha confirmado que la empresa promotora, Totisa Holdings, ha presentado un escrito de desistimiento para no continuar con el procedimiento.
Seis años perdidos
Calzada lamenta los años perdidos en la tramitación del expediente, aunque señaló que la decisión era "lo lógico" a la vista de los informes emitidos.
El proyecto, que en 2019 fue aprobado por el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, fue invalidado porque la generación de electricidad a través de GNL no sería "factible" por la cercanía a la población, ya que cualquier tipo de emisión podría causar daños, explica la presidenta
Almacenamiento y biocombustibles
Ante este revés, la Autoridad Portuaria ha estado trabajando internamente en otras alternativas energéticas desde hace meses. La nueva prioridad es la posibilidad de instalar tanques de almacenamiento de GNL en lugar de plantas de generación, lo cual permitiría dotar al puerto del combustible sin las emisiones asociadas a la producción.
Además del GNL de almacenamiento, la Autoridad Portuaria está enfocando su estrategia en los biocombustibles. El Puerto de Las Palmas quiere sumarse a este alternativa y seguir la tendencia internacional del sector marítimo, pues es posible aprovechar el actual sistema de tanques sin necesidad de grandes inversiones, además de facilitar la transición hacia combustibles 100% verdes.
Hidrógeno
A esto hay que sumarle los proyectos de suministro de hidrógeno puestos en marcha con Megaturbinas Arinaga SA, tanto en el puerto del sureste como el que se está tramitando en la capital grancanaria, aunque se trata de un combustible todavía en fase de experimentación.
Actualmente, el almacenamiento de hidrógeno conlleva mucho espacio, es difícil de transportar y de manipular, con complejidades que no están resueltas, siendo el GNL la principal apuesta de Europa por su mayor eficacia. De ahí que la Autoridad Portuaria trabaje con las empresas instaladas en el puerto para comenzar a suministras gas y no perder competitividad con respecto a otro puertos.
Obligación y prioridad
Las Palmas es el segundo puerto nacional en suministro de combustible, sólo por detrás de Algeciras. Es, por tanto, una "prioridad" y una "obligación" asegurar la disponibilidad del combustible que el sector marítimo internacional requiera, con la finalidad de seguir manteniendo el liderazgo en el Atlántico Medio.
Las declaraciones de la presidenta se produjeron durante la inauguración del nuevo cuartel de la Guardia Civil en el puerto de La Luz, donde reafirmó la prioridad de avanzar en soluciones energéticas sostenibles para el recinto portuario.
El puerto busca consolidarse como referente en transición energética y eficiencia operativa, sin renunciar a su papel clave en la logística y el abastecimiento del Atlántico medio.