El concurso de Mar Abierto SL entra en una fase clave. El magistrado del Juzgado de lo Mercantil nº1 de Las Palmas, Alberto López Villarrubia, ha ordenado la adjudicación provisional de los lotes 1 al 5, surgidos de la subasta de mayo, con un reparto que favorece a Isla Marina SL —filial de Lopesan—, Lopesan Touristik SAU y Servatur SA y deja fuera de juego a LIVVO —del Grupo Martinón—.
El lote más codiciado incluye tres hoteles en Mogán —LIVVO Lago Taurito, LIVVO Valle Taurito y LIVVO Costa Taurito—, actualmente gestionados por LIVVO Hotel Group, además de la concesión administrativa sobre el emblemático Hotel Las Tirajanas, en San Bartolomé de Tirajana. A ello se suman 26 locales comerciales en Playa Taurito, que ocupan en conjunto 1.118,5 metros cuadrados, y dos solares edificables en Meloneras, con 11.906 y 6.090 metros cuadrados de edificabilidad, respectivamente, lo que convierte este paquete en uno de los más atractivos de la liquidación de Mar Abierto.
El caso afecta de lleno al imperio Lopesan, que logra hacerse con cuatro activos estratégicos en un procedimiento marcado por la urgencia en liquidar bienes para atender a los acreedores. Sin embargo, el auto abre la puerta a la polémica: el juez no ha dado audiencia a los representantes de los trabajadores de Mar Abierto SL, tal y como impone expresamente el artículo 220 del Texto Refundido de la Ley Concursal (TRLC), que obliga a escuchar a la representación laboral antes de aprobar la enajenación de unidades productivas.
Pujas ajustadas
El detalle de las pujas arroja un panorama muy ajustado. Por el lote 1, compuesto por tres hoteles y una concesión administrativa, Isla Marina presentó una oferta de 85 millones de euros, más del doble del precio de salida (39,3 millones). El lote 2, un local comercial, también fue para Isla Marina, que ofreció 5,201 millones frente a los 5,2 millones de Perfumería Europa, apenas mil euros de diferencia.
Los lotes 3 y 4, que consisten en parcelas, fueron adjudicados a Lopesan Touristik. En el lote 3, Isla Marina ofertó el mínimo exigido, 3,5 millones, pero Lopesan mejoró con 3,6 millones, logrando la adjudicación. En el lote 4, Isla Marina volvió a pujar justo el precio de salida, 2,9 millones, y Lopesan se impuso con 3 millones, superándola por tan solo 100.000 euros.
Por último, el lote 5, también una parcela, quedó en manos de Servatur SA, que ofertó 2,64 millones frente a los 2,63 millones de Isla Marina. La diferencia fue de apenas 10.000 euros.
Acreedores
El juez destaca que las adjudicaciones permitirán ingresar en la masa activa 14,4 millones de euros de forma inmediata para atender a los acreedores, al margen del lote hotelero. En total, la primera subasta de cinco lotes ha alcanzado los 99,2 millones de euros, una cifra superior al pasivo reconocido de 84,7 millones.
No obstante, la resolución abre un flanco jurídico relevante: el magistrado no ha dado audiencia a los representantes de los trabajadores de Mar Abierto SL, un trámite obligatorio según el artículo 220 de la Ley Concursal (TRLC)antes de enajenar unidades productivas. El propio auto reconoce que, en el caso de los tres hoteles incluidos en el lote 1, esa audiencia debe celebrarse, pero aun así autoriza la adjudicación provisional sin haber escuchado a la parte social.
Medidas judiciales
Además, el auto confirma que la adjudicación definitiva del lote 1 no podrá ejecutarse mientras sigan vigentes medidas judiciales que bloquean las fincas de los hoteles Valle y Lago, objeto de un incidente concursal promovido por Proivesa.
La decisión, que puede ser recurrida en reposición, supone un triunfo parcial para Lopesan, que se asegura varias parcelas estratégicas en Mogán y Maspalomas, mientras que una de sus filiales se lleva el grueso del paquete con el lote hotelero y un local comercial, y Servatur arrebata una de las parcelas por un estrecho margen.