Miller Bajo crea su asociación empresarial para mejorar competitividad e infraestructuras
Miller Bajo crea su asociación empresarial para mejorar competitividad e infraestructuras

Miller Bajo crea su asociación empresarial para mejorar competitividad e infraestructuras

El nuevo colectivo, impulsado por FEMEPA, busca fortalecer la competitividad y promover la colaboración público-privada

Atlantico Hoy

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La Federación Provincial de la Pequeña y Mediana Empresa del Metal y Nuevas Tecnologías de Las Palmas (FEMEPA) ha promovido la creación de la Asociación Empresarial del Área Industrial y Comercial de Miller Bajo (AEmiller), un nuevo organismo que agrupará al empresariado de esta zona estratégica de Las Palmas de Gran Canaria con el fin de impulsar su regeneración industrial y comercial.

La constitución oficial tuvo lugar este jueves en la sede de FEMEPA, con la participación de numerosos empresarios que aprobaron los estatutos fundacionales y eligieron la primera Junta Directiva, presidida por Juan Suárez Guillén. Le acompañan Manuel Sánchez Moreno como vicepresidente, David Sánchez Garrido como tesorero, y Antonio Alejandro Santana Sosa, Marco Antonio Herrera Perales y Luis Ignacio Vega Armas como vocales.

Hoja de ruta y objetivos

El secretario general de FEMEPA, Juan Carlos Betancor García, afirmó que la creación de AEmiller “marca un punto de inflexión para recuperar el dinamismo industrial y comercial de Miller Bajo, con una estructura sólida que represente los intereses comunes de sus empresarios y favorezca la colaboración público-privada”.

La nueva asociación elaborará un censo actualizado de propiedades industriales y comerciales, definirá su ámbito territorial con la Administración y redactará un plan estratégico de desarrollo. También preparará memorias valoradas para solicitar mejoras en infraestructuras con apoyo del Cabildo de Gran Canaria y el Gobierno de Canarias.

Con AEmiller, FEMEPA refuerza su modelo de apoyo a las asociaciones empresariales zonales y entes urbanísticos de conservación, siguiendo experiencias exitosas como Ecosalinetas, Mafraeco y Cortieco, que han demostrado el potencial del tejido empresarial organizado para transformar los entornos industriales en espacios más seguros, sostenibles y competitivos.