El Puerto Deportivo de Pasito Blanco y la urbanización privada que es necesario atravesar para llegar a la playa de El Hornillo, en el sur de Gran Canaria. / AH
El Puerto Deportivo de Pasito Blanco y la urbanización privada que es necesario atravesar para llegar a la playa de El Hornillo, en el sur de Gran Canaria. / AH

Los accesos públicos a Pasito Blanco bloquean la inversión de Lopesan en su puerto deportivo

San Bartolomé de Tirajana paraliza los trabajos emprendidos por la comunidad de propietarios para actualizar las infraestructuras. Costas reclama que no se den licencias hasta sacar de la concesión el uso de los viales y de la playa

El Puerto Deportivo Pasito Blanco, ubicado en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, carece de autorización para ejecutar las obras previstas en la prórroga de la concesión del dominio público portuario que le ha sido otorgada por el Gobierno de Canarias.

La prórroga fue concedida a finales de agosto por Puertos Canarios, es de carácter excepcional y permite al Grupo Lopesan explotar la marina deportiva 25 años más. 

La empresa, a cambio, debe invertir más de cuatro millones de euros en mejoras, pero el proyecto está parado por el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, que, a su vez, ha recibido un requerimiento de Costas para no autorizar los trabajos.

Choque de intereses

El organismo estatal quiere actualizar la vieja concesión conforme a la Ley de Costas de 1988. El permiso original es del año 1972 e incluye toda la urbanización dentro del dominio portuario, pero las carreteras, la urbanización y la playa anexa son zonas de dominio público marítimo terrestre, es decir, los accesos o los usos de estas infraestructuras deben quedar excluidos de la concesión prorrogada.

Barreras

La Demarcación de Costas en Canarias quiere que se calculen y se delimiten ambos espacios, con la finalidad de recuperar el acceso público sin restricciones a ese tramo de litoral, pues se ha venido gestionando de manera privada desde la década de los setenta.

Al comienzo del recinto existe un control de acceso que filtra la entrada de vehículos: si vas a la playa y no resides allí, debes dejar el coche fuera y caminar por toda la urbanización para llegar a la costa.

Ese control de acceso, a juicio de Costas, debería estar en el Puerto Deportivo, no a la entrada del complejo residencial.

Lopesan, a instancias de la administración estatal, ha levando estos días las barreras, pero aún queda resolver el fondo del asunto, que pasa por calcular los metros cuadrados de cada área para actualizar la concesión conforme a la Ley de Costas.

Paralización cautelar

El Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, de hecho, ha parado las obras emprendidas por la Comunidad de Propietarios de Pasito Blanco, que, como promotor del proyecto, ha contratado a Lopesan para actualizar sus infraestructuras.

El Puerto Deportivo Pasito Blanco (Canarias) S.L. tiene la obligación de invertir 3.397.319,40 euros en obras de modernización, así como 872.519,49 euros en mantenimiento adicional y la reposición de instalaciones existentes por valor de 872.519,49 euros.

Bloqueo

En total, 4,2 millones de euros para garantizar la puesta a punto y la conservación de la infraestructura portuaria, además del canon anual por la ocupación del dominio público, que asciende a 163.457,95 euros. 

Toda esta inversión económica está bloqueada por el conflicto con la delegación estatal de Costas, una controversia que se extiende también al barranco de Pasito Blanco, cuyas obras de canalización son investigados por la Guardia Civil y afectan a la urbanización contigua Meloneras Golf, que igualmente es ejecutada por Lopesan y ha sido parada por motivos similares, esto es, por carecer de licencia.