Gran Canaria tiene por delante el reto de encontrar los restos de más de 70 represaliados por el franquismo. La base para empezar los trabajos es una subvención de 100.000 euros otorgada por parte del Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática, encabezado por Ángel Víctor Torres —expresidente del Gobierno autonómico— que permitirá investigar, exhumar e identificar a las personas desaparecidas en fosas durante la dictadura.
Las ayudas, anunciadas a principios del pasado mes de junio, están destinadas a los siete cabildos insulares con el objetivo de cerrar cuanto antes las heridas de muchas familias en el Archipiélago que perdieron a alguien durante los casi 40 años de oscuridad, terror y represión sufridos en España tras la Guerra Civil. La previsión es que en la isla capitalina las actuaciones se desarrollen en el plazo de un año.
"Buscar la dignidad"
Manuel Ortego, secretario de la Asociación por la Memoria Democrática de Arucas (AMHA), asegura en declaraciones a Atlántico Hoy que la noticia supone una esperanza para todos aquellos que aún viven con la incertidumbre de saber qué ocurrió con sus ascendientes. “Pensemos que está desapareciendo esa generación de víctimas directas”, afirma. “Hay que buscar la dignidad para quienes fueron injustamente asesinados”, añade.
Pone sobre la mesa que Pino Sosa, la presidenta de la asociación —con 88 años de vida, más de dos décadas de lucha y “su cabeza bien amueblada”— les sigue transmitiendo la información de toda esa época de reclamación de derechos. “Ella era la que hacía los pasillos, se peleaba con todo el mundo, y presentaba escritos en todas las instituciones”, comenta.

La Sima de Jinámar
Con la llegada de la nueva Ley de Memoria Democrática, la búsqueda de quienes fueron represaliados por el franquismo pasó a ser responsabilidad de las administraciones públicas. “Nos congratula saber que el Ministerio ha sacado esa línea de ayudas”, señala. Además, cuenta que hace algunas semanas mantuvieron una reunión con el consejero de Presidencia del Cabildo de Gran Canaria, Teodoro Sosa, para abordar el asunto.
“El Cabildo tiene claramente definida su hoja de ruta al respecto de este trabajo técnico que hay que hacer. De hecho, ellos arrancaron iniciaron todo lo de la Sima de Jinámar”, sostiene. Se refiere a la primera intervención arqueológica en la que, a finales de octubre de 2024, encontraron los restos óseos de cuatro hombres adultos.
Memorial oral
Detalla que en la línea estatal de ayudas está incluido el tercer pozo de Arucas, conocido como el de la Vuelta del francés. Allí, la memoria oral comenta que hay restos humanos. Merece la pena resaltar que en el norte de Gran Canaria se calcula que podrían encontrarse alrededor de 70 personas. “Lógicamente son más porque hay que sumar lo que era el municipio de San Lorenzo que después se anexionó a Las Palmas de Gran Canaria”, narra.
Apostilla que puede haber una media de 30 o 40 personas más en el resto de los pozos. “Siempre hay que partir del hecho de que se trabaja con lo que era la memoria oral y lo que la gente iba diciendo para que, de alguna forma, no se perdiera”, sentencia. Ortego señala que el Ayuntamiento de Arucas también está muy sensibilizado con el tema y ya inició la redacción de proyectos técnicos.
Donar el ADN
“Habrá una mesa de coordinación entre el ayuntamiento, el Cabildo, el Gobierno de España y el Gobierno de Canarias”, indica. El secretario de AMHA narra que todos los meses pasan por la asociación dos o tres personas que quieren donar su ADN para facilitar el desarrollo de los trabajos. Sin ir más lejos, aún hay restos de 24 personas que están sin identificar.
Cuenta que hay personas que rondan los 40 o 50 años, por ejemplo, que prefieren ir a donar ellos para evitar que sus familiares más mayores pasen ese proceso. “Nos dicen que vienen a donar el ADN para identificar los restos porque no quieren hacer que sus padres vuelvan a vivir ese dolor”, sentencia.

