El Gobierno de Canarias ya ha recibido tanto en formato digital como físico la totalidad del Catálogo Símbolos, Calles, Monumentos y Menciones Franquistas en Canarias elaborado por expertos de la Universidad de La Laguna. Pese a tenerlo ya, entero, en sus manos, para la aprobación todavía queda un largo periodo, ya que aún no se ha dado la orden para que inicie todo el procedimiento administrativo.
Desde la Consejería de Universidades, Ciencia, Innovación y Cultura todavía no se ha dado la orden por la que se somete el catálogo a información pública y que iniciaría todo el proceso. Se espera que se publique “en breve”, según trasladan fuentes de la consejería, aunque no dan un plazo. Sí que apuntan que una vez se apruebe la orden, tardará una semana en publicarse en el Boletín Oficial de Canarias.
El proceso
A través de esa orden también se prevé la creación de un grupo de trabajo especializado en Memoria Democrática adscrito a la Dirección General de Cultura y Patrimonio Cultural. Esta comisión tendrá funciones de asesoramiento no vinculante en el análisis y será quien dé respuesta a las alegaciones que se presenten al documentos.
Los alegatos al documento se presentarán en el plazo de exposición pública que se abra después de la publicación en el BOC del documento completo, que será de 20 días. Una vez se tenga tanto el expediente del catálogo como los informes de las alegaciones, se deberá elevar toda la documentación a la Comisión Técnica de Memoria Histórica, que deberá emitir un informe preceptivo, apuntan desde la consejería.
Una vez se tenga ese informe de la comisión se dictará una nueva orden desde la consejería para abrir de nuevo el trámite de audiencia a las personas interesadas en el procedimiento. Tras la respuesta a las alegaciones, se dictará la orden que apruebe definitivamente el documento. Todas estas fases plantean una posible aprobación del catálogo que se prolongaría más allá de este año, si se tiene en cuenta el alto número de alegaciones que se prevé que se presenten.
El catálogo
El catálogo consta de tres fases. La primera recoge los vestigios franquistas presentes exclusivamente en Santa Cruz de Tenerife. La segunda fase recoge la situación en las capitales insulares, es decir, incorpora los vestigios de Las Palmas de Gran Canaria. La tercera y recién entregada analiza la situación en el resto de islas del Archipiélago.
Esto implica que ya se tiene toda la documentación del Archipiélago para la aprobación del catálogo. Justo fue la publicación parcial del catálogo la que lo paralizó en los juzgados.
El conflicto
El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) suspendió cautelarmente el catálogo cuando fue aprobado por el anterior Gobierno de Canarias porque, aunque la orden de aprobación se publicó en el BOC, el documento completo solo estaba disponible en la web, lo que viola el trámite legal de publicación íntegra en el boletín y puede afectar derechos de terceros.
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife recurrió el catálogo alegando que solo incluía elementos de su municipio, lo cual consideraba “arbitrario”. Con el actual gobierno (Coalición Canaria y Partido Popular), se inició el proceso de revocación del catálogo, suprimiendo la orden anterior.
