Si hay un producto característico en la isla de El Hierro, sin duda es la piña. Actualmente esta fruta, insignia de la idiosincrasia herreña, está pasando por uno de sus momentos más complicados llegando a reducir drásticamente sus hectáreas y poniendo en peligro su cultivo.
Con la desaparición de algunos fitosanitarios utilizados se empezó a detectar una plaga que se ha apoderado de la fruta, generando que los rendimientos bajen en un 60% en los últimos cuatro años.
Esto ha supuesto un problema para los agricultores, especialmente económico. “Es la pescadilla que se muerde la cola. Cuanto menos agricultores, menor producción hay. No ven rendimiento en la producción, y por eso abandonan”, señala a Atlántico Hoy el presidente de SAT Frutas de El Hierro y vicepresidente de PALCA, Pablo Carmona.

Cultivo perdido
Carmona apunta que en años atrás se llegaba a las 120 hectáreas de cultivo y casi 200 productores. A día de hoy las hectáreas han bajado a 80 y los productores a la mitad. “A raíz de que nos fueron prohibiendo los fitosanitarios se empezaron a detectar una serie de enfermedades y plagas”, detalla.
Lo que se sabe hasta ahora es que se trata de un virus llamado ‘la tristeza de la piña’ siendo la cochinilla el vector de transmisión. El Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA) se encuentra investigando la situación. “Arrancamos una planta y prácticamente no tiene raíces, cuando eso no sucedía”, subraya.
Trabajos
Los primeros indicios apuntan a que podrían ser problemas del suelo. “Venimos haciendo trabajos, y con ellos la desinfección natural del suelo, que es un procedimiento que ya se ha aplicado en algunas parcelas. Va funcionando, pero el problema es que el ciclo de siembra de la piña es muy largo desde que plantas hasta que recoges, llegando a esperar 20 meses”.
Para los productores sería “catastrófico” seguir perdiendo un producto tan emblemático. Empezaron a notar el problema hace seis años, lo que ha generado que actualmente exista un protocolo de actuación de la Consejería del Sector Primario a través del ICIA con el que se están buscando alternativas naturales para combatir las plagas para ir buscando material vegetal saneado a través de viveros en Tenerife que producen plantas in vitro.
"Nos hemos dado contra un muro de frente"
Fabio Toledo, técnico de la Cooperativa del Campo Frontera, señala a este medio que nunca ha habido productos fitosanitarios autorizados para el cultivo de la piña tropical. "Los productos con los que trabajamos nos ayudaban a salir del paso nos hemos encontrado con un muro de frente, que es la gran cantidad de material virótico que tenemos en la isla", apunta. En el Valle de El Golfo, por ejemplo, puede estar afectado un 70% del cultivo.
Siguiendo la línea de Carmona, Toledo insiste en que el problema viene por la falta de fitosanitarios para el control de la cochinilla, ya que es el vector que mueve ese virus. "Cada vez hay menos material vegetal para seguir plantando".