El Instituto Municipal de Deportes (IMD), órgano dependiente del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, anunció este jueves que estudiará la presencia de un rebaño de cabras en el Centro Deportivo San Lorenzo —instalación inaugurada hace menos de un año y que costó tres millones de euros— y recordó que, según su reglamento, no se permite la entrada de animales en instalaciones deportivas, salvo excepciones como los perros guía. De confirmarse la responsabilidad del propietario del grupo de rumiantes, este podría enfrentarse a sanciones económicas.
El problema, admitieron desde el consistorio capitalino, es que el recinto, ubicado en la antigua presa de Martinón —en el barrio de El Zardo—, es de uso libre y no cuenta ni con auxiliar de cancha ni con vigilante, circunstancias que facilitan que el rebaño de cabras acceda al centro deportivo y genere molestias a los usuarios —desde zonas llenas de excrementos hasta la ocupación de canchas de juego—.

Mejoras
El ayuntamiento, además, recalcó que la instalación, ubicada en el área protegida de Pino Santo, está sujeta a estrictas normativas ambientales que impiden su asfaltado, aseguró que el mantenimiento es constante. Así, subrayó que, a pesar de las condiciones medioambientales que limitan ciertas intervenciones, se está trabajando para mejorar el estado de la instalación y se lanzó el compromiso de retirar la hierba de la zona de tiro con arco en un futuro cercano.
El Centro Deportivo de San Lorenzo, que dispone de una superficie de más de 115.000 metros cuadrados destinados a 15 disciplinas deportivas, cuenta con un circuito de pump truck y en las que los ciudadanos de Las Palmas de Gran Canaria pueden desarrollar actividades como el motocross, tiro con arco, fútbol siete, baloncesto, fútbol playa, vóley playa, crossfit, trialsín, trial, balonmano o calistenia.
