José Eduardo Ramírez: "Hay que repensar si la única manera de llegar al Sebadal es en coche"

El concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas reclama que el coche deje de ser el centro de la planificación de las ciudades

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José Eduardo Ramírez, concejal de Movilidad, Promoción Económica y Ciudad de Mar del Ayuntamiento de Las Palmas. / Ayuntamiento de Las Palmas
José Eduardo Ramírez, concejal de Movilidad, Promoción Económica y Ciudad de Mar del Ayuntamiento de Las Palmas. / Ayuntamiento de Las Palmas

Las Palmas de Gran Canaria tiene un problema con el tráfico en sus puntos más congestionados que no se va a solucionar solo con las obras que el Ayuntamiento exige al Gobierno de Canarias y el Cabildo de Gran Canaria, sino con un cambio más profundo en la movilidad. Eso es lo que afirma José Eduardo Ramírez (Las Palmas de Gran Canaria, 1973), concejal de Movilidad, Promoción Económica y Ciudad de Mar desde 2015. "En el Ayuntamiento estamos haciendo la parte del trabajo que nos toca, que es intentar descargar de vehículos esos puntos negros", explica.

Esos puntos son sobre todo tres: Belén María, en el Sebadal; Torre Las Palmas, junto a la entrada del túnel de Julio Luengo; y Plaza de Las Américas. De momento, el Gobierno solo ha anunciado la obra de la primera, en la que se soterrará el tráfico de salida y entrada del polígono industrial. Pero el Ayuntamiento considera más urgente la intervención en Torre Las Palmas, donde la opción más factible, aunque también más costosa, parece ser otro soterramiento.

"La solución con un pequeño escalextric generaba dificultades con algunos vecinos de la zona de Ciudad Jardín, que se oponían, e invadía la playa de las Alcaravaneras. El tema es hacerlo todo bajo tierra. Si no se quieren hacer estructuras que dificulten la convivcencia de las viviendas con el mar, no queda otra que hacerlo con un soterramiento. Es una solución compleja, pero factible. Hay que buscar una solución menos invasiva del espacio, con menos impacto", señala Ramírez.

A pesar de que reconoce que la ciudad tiene varios puntos negros de tráfico, concentrados en el tramo que va desde El Sebadal hasta la salida del túnel de Julio Luengo, el concejal defiende que la ciudad tiene pocos atascos en comparación con otras de similar tamaño, aunque reconoce que queda trabajo por hacer. Y ese trabajo pasa por que el coche no sea el centro de la planificación de las administraciones públicas. "Las politicas de movilidad no pueden estar solo orientadas al vehículo privado. Hay que cambiar el chip", dice.

"La circunvalación ha demostrado que a más infraestructura, mismos problemas, porque hay más coches. Aquellos que soñaban con que la circunvalación iba a terminar con los problemas de trafico de la capital se equivocaban", dice. Y repite un mensaje similar cuando habla de El Sebadal: "Cuando hagamos el soterramiento de Belén María, lo que vamos a conseguir es que la gente llegue antes al atasco de Torre Las Palmas. Hay que buscar soluciones al tráfico, pero sobre todo hay que repensar si la única manera de llegar al Sebadal es el coche".

"Tenemos que dar alternativas"

"Nosotros tenemos que dar alternativas para que la gente que puede elegir se mueva de otra manera. No basta con decirle a la gente que deje el coche en casa", continúa Ramírez. Entre esas alternativas están las guaguas, el servicio de bicicletas, el recién anunciado servicio de patinetes, los párquines disuasorios o la futura MetroGuagua. "(Con la MetroGuagua) Esperamos que muchos viajeros dejen el vehículo en casa", dice Ramírez, que confía en que ayude a descargar de tráfico el itsmo, la zona en la que se concentran los peores puntos del tráfico, pero que tiene difícil solución.

"En el itsmo convergen una zona industrial, el puerto, un barrio populoso como el de La Isleta, una base militar de la que entran y salen 3.000 personas todos los días... Convergen todos los atractores de primer nivel. El espacio es el que es, esa es la configutacion de la ciudad. Con eso tenemos que trabajar", dice.