El subinspector J.C.G.P. de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria, que estaba de baja y al que el Ayuntamiento reclama 1.736 horas (248 días) por abandono del servicio en un informe al que tuvo acceso Atlántico hoy, ya se encuentra reincorporado a su puesto de trabajo.
Según ha podido confirmar este periódico, el agente recogió el pasado viernes su ropa profesional del vestuario. Además, desde el lunes su nombre aparece en el listado de servicios.
Polémica
La prolongada baja del subinspector no ha estado exenta de polémica ya que durante la misma se presentó y aprobó las oposiciones de ascenso a inspector, lo cual supone una anomalía y de hecho ahora mismo se encuentran paralizadas.
Precisamente, cuando no habían pasado ni 24 horas de la publicación de estos hechos en Atlántico Hoy, una resolución firmada a mediados de marzo de este año por la Jefa de Sección de Selección y Provisión del Consistorio, la Directora General de Recursos Humanos y el Oficial Mayor, argumentaba que el policía tenía que haberse presentado hacía un año a su puesto de trabajo.
Seguridad Social
“Una vez revisados los datos obrantes en este servicio de RR.HH, se detecta que, conforme a los datos obrantes en la sección de Gestión Económica y Obligaciones de Orden Social relativo a situaciones de baja por incapacidad temporal y en la sección de Inspección de Servicios sobre el registro de la jornada en el aplicativo GIT, el empleado figura de baja médica desde 30 de septiembre del año 2021, hasta la fecha de su alta el día 28 de marzo de 2023, no existiendo constancia de partes médicos posteriores presentados ni registro diario de la jornada, por lo que se interesa se acredite el intento de contacto con el trabajador para poder acreditar un presunto abandono del servicio y para poder conocer a qué se deben dichas ausencias al servicio, así como si consta en el aplicativo de gestión policial la petición de disfrute de vacaciones y permisos en dicho periodo de ausencia”, detalla el documento que indica además que también podría enfrentarse a una sanción disciplinaria.
El 7 de marzo de 2023 se contactó telefónicamente con el policía, que se excusó alegando que estaba pendiente de pasar un Tribunal Médico; “que ha existido un error informático en la Seguridad Social por no haber sido citado en un período concreto de lo que ésta iba a dar conocimiento al Ayuntamiento y que lo anterior puede corroborarse en el teléfono de un trabajador de dicha Institución y con una trabajadora municipal”, especificaba el informe del Consistorio.
La Jefatura de la Policía Local declaró que no había registro de solicitud de vacaciones o permisos durante el tiempo de ausencia del empleado. Como no proporcionó ninguna justificación documental para esas ausencias, ni documentos que respalden lo afirmado por el empleado, se decidió ajustar su salario por las horas que debía.