Los vecinos de Los Tarahales tendrán que esperar aún más para conquistar una de sus reivindicaciones históricas: contar con una conexión digna entre la recta principal del barrio y la rotonda de La Ballena. No les queda otra después de que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria haya perdido 1,7 millones de fondos europeos para acometer la segunda fase de los trabajos.
La obra, con un valor de 2,9 millones de euros, pretende mejorar la cohesión territorial entre Ciudad Alta y los puntos periféricos. Pero un informe elaborado por el área de Urbanismo revela que, al no haber adjudicado a tiempo la licitación, el dinero que venía de los Next Generation se han ido —de momento— por el sumidero. Quienes viven por la zona aseguran que sienten “una decepción enorme”.
Escepticismo
Ramón Hernández, portavoz de la plataforma vecinal Los Tarahales Reacciona, pone sobre la mesa que se trata de una demanda histórica para el barrio que todavía no llega. “Por las causas que sean, no sé si se trata de incompetencia o de falta de personal, en definitiva, lo que lleva ocurriendo desde hace 15 o 20 años en este ayuntamiento”, subraya.
Se muestra bastante escéptico ante lo que pueda pasar a corto o medio plazo “porque 2027 es año electoral y ahí, evidentemente, no se hará nada”. El principal problema está en que los jóvenes que vayan a clase por la mañana y regresen a casa al mediodía, se verán obligados —un curso más— a transitar por el arcén.

Marquesinas
“Con el riesgo de atropello que conlleva”, afirma Hernández. Pero la cosa no queda ahí, porque el efecto de las lluvias o la falta de aparcamiento son otros inconvenientes que pueden poner en jaque a la zona. Lamenta que en el Consistorio se estén dando tanta prisa con el proyecto de nueva Ciudad Alta y que no exista la misma prioridad para la conexión de Los Tarahales.
“Esto es de vital importancia y vemos que no van a empezar la obra este año. Además, llevamos más de ocho años pidiendo las marquesinas de Guaguas Municipales que no llegan”, expone el representante vecinal. “El problema es la falta de gestión, evidentemente, del gobierno municipal"”, añade.

"Se perdió tiempo"
Detalla que el proyecto inicial —elaborado por el anterior concejal de Urbanismo, Javier Doreste— ha cambiado “y ni siquiera se presentó a los vecinos”. “Se perdió mucho tiempo”, exclama. “Tiene que entrar alguien que dote al Ayuntamiento de una vez del personal necesario”, apostilla Hernández.
“Es una decepción enorme la que nos hemos llevado. Vamos a esperar a ver si en 2026 son capaces de hacerlo a través del plan de cooperación del Cabildo o de otra forma, pero lo veo complicado porque los plazos son los que son. Pero bueno, vamos a ver si nos sorprenden, porque esto no puede seguir así”, reflexiona.
Versión del Ayuntamiento
Mauricio Roque, concejal de Urbanismo, explicó este martes en Comisión de Pleno que la clave para resolver situaciones de este tipo está en acompasar los tiempos entre el expediente administrativo de contratación y las ayudas. “Es donde realmente está la incidencia, en los plazos que se establecen para las subvenciones”, matizó.
“Según lo que ha anunciado el propio Ministerio, parece que la Unión Europea tiene la intención de ajustar los plazos y dar más tiempo para realizar las obras, al menos las que tengan viabilidad de proyecto, que estén aprobadas y que no tengan sino que esperar por la financiación”, prosiguió.
Financiación
Puso sobre la mesa que, una vez se produzcan esas ampliaciones, están abiertos a ponerlos en la financiación como se ha hecho con la estación para la MetroGuagua de Hoya de la Plata. “Se perdió una financiación por una ejecución de obra y por un incumplimiento de la contrata y enseguida revertimos la situación”, sentenció.
Gustavo Sánchez, concejal del Grupo Popular, recriminó al responsable de Urbanismo que “al final lo que termina pasando es que perdemos recursos que nos vienen de otras administraciones para poder llevar a cabo nuestro programa de actuaciones". “Especialmente”, apuntó, “en materia de inversiones”.
