El papel del turismo en Canarias es principal, pero no a cualquier coste. Hace mucho que el debate sobre este sector económico se sitúa sobre si se debe seguir creciendo ad infinitum o si habría que echar el freno de mano y buscar nuevos enfoques. Nadie es ajeno a ello y el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, lo ha puesto sobre la mesa durante su intervención de apertura del Debate general sobre el estado de la nacionalidad canaria que ha arrancado este martes.
"¿Necesitamos crecer más? ¿Cómo redistribuimos la riqueza?", se pregunta el presidente. El espacio y los recursos son finitos, y el crecimiento de la industria del turismo no se está reflejando en los salarios de los trabajadores del sector, que continúan siendo bajos y poco cualificados.
Sobre el reparto de la riqueza, Clavijo lo tiene claro. "O suben los salarios, vinculándolos a la productividad o se les deben subir los impuestos porque son las dos únicas formas de lograr ese objetivo; unas islas más justas y solidarias".
Sostenibilidad
El futuro del turismo debe estar centrado en la sostenibilidad, señala el presidente. El sector debe asegurar un equilibrio entre los intereses económicos y las necesidades de los residentes locales.
Este objetivo va ligado a la sostenibilidad. No solo es fundamental evitar la saturación de las islas para no comprometer su atractivo turístico ("¿Hasta qué punto va a resultar atractivo para el turista visitar unas islas saturadas?", se pregunta Clavijo), sino que todos los factores medioambientales, sociales y económicos deben ir por delante a la hora de enfocar el crecimiento del sector para evitar que "muera de éxito".
Debate sosegado y riguroso
El presidente sostiene que es vital iniciar un debate social, político y académico sobre el modelo turístico que se quiere para Canarias en el futuro. Este debate debe ser "sosegado y riguroso", sin líneas rojas, pero con un objetivo claro: mantener al turismo como un motor económico y garantizar una convivencia armónica con los residentes, apunta el presidente.
En definitiva, Clavijo asume que el Gobierno tiene la responsabilidad de liderar y fomentar este debate, tomando decisiones que guíen el futuro del turismo y definan la Canarias de las próximas décadas.
