"Seguimos trabajando". Con esa escueta respuesta, uno de los presentes en la reunión que este martes mantuvieron Podemos, Sí Se Puede (SSP), Equo, Izquierda Unida, Más Canarias y Verdes, proyectó en un negatoscopio una radiografía perfecta sobre el estado de la situación: aún no hay acuerdo para conformar una coalición a la izquierda del PSOE de cara a las elecciones municipales, insulares y autonómicas del 28 de mayo.
El plan común, después de amagar con una especie de trato al tercer día de 2023, debía presentarse en sociedad esta semana. La cordialidad, sin embargo, duró poco: en uno de esos enredos habituales entre todas las familias de la izquierda todo se torció la semana pasada por asuntos de cierto peso como la composición de las listas –en especial en Lanzarote y Tenerife– y por otros tan triviales como bautizar con un nombre a la criatura.
Diferencias
La distancia entre Podemos y Más Canarias, en concreto, empieza a medirse en kilómetros. La delegación en las Islas de Más País –proyecto liderado por Íñigo Errejón– ha pedido encabezar las principales listas de Lanzarote –parlamento regional, Cabildo, Ayuntamiento de Arrecife y otros municipios relevantes–, un precio que la formación morada –por marca, fuerza de gobierno, presupuesto y espacios televisivos– no está dispuesta a pagar.
Sí Se Puede, con peso en Tenerife, ha levantado la mano para solicitar el número uno en la lista archipielágica, además de mantener a Rubens Ascanio como candidato a la alcaldía de La Laguna. Ambas propuestas no incomodan a Podemos; el debate, sin embargo, está dentro de SSP, donde hay fuerzas internas que empujan a la formación a buscar un pacto con Proyecto Drago –movimiento liderado por Alberto Rodríguez y que ya ha descartado participar de cualquier coalición en la que esté presente Podemos–.
Los nombres
Además de las diferencias políticas –Proyecto Drago, por ejemplo, llegado el caso no apoyaría la reedición del Pacto de las Flores– y de organización interna –con la composición de las listas–, la alianza de los partidos de izquierda ha encallado por cuestiones superfluas como el nombre. Después de aceptar Canarias Plural como posibilidad, y tras descartar alternativas como Unidas Podemos Más, Sí Podemos Más o Confluencia, Podemos pidió repensar el tema y poner en valor su marca.
A cuatro meses de los comicios, con este tercer acto ya en escena, en Podemos también hay abierta una discusión a nivel interno que tiene que ver con los tiempos: unos asumen que será imposible alcanzar un amplio acuerdo y exigen tomar una decisión ya para evitar que la agonía –como sucedió en las autonómicas andaluzas– se enroque aunque eso signifique que el 28 de mayo haya varias papeletas de formaciones de izquierda; otros, sin embargo, prefieren alargar el partido para intentar llegar a un acuerdo –aunque sea en la tanda de penaltis–.
Proyecto Drago, Reunir y #hastaelcoño
En Podemos, además, no contemplan abrir la coalición a formaciones como Proyecto Drago o Reunir. "Alberto Rodríguez pretende hacer pagar a Canarias su problema con Pablo Iglesias e Irene Montero", afirman en la formación morada. "Parece que prefiere que vuelva a gobernar Coalición antes que un pacto, con sus errores y también con sus aciertos, progresista", subrayan. También descartan de la ecuación a Reunir. "Con ellos", argumentan, "por la actitud de Emma Colao a lo largo de estos años, que ha ejercido como submarino de Coalición y de su anterior partido, el PP, y con el apoyo de gente como Meri Pita o Javier Doreste, no hay nada que hablar".
Reunir ha anunciado para este viernes, a las 17.30 horas, un acto en la Alameda de Colón para presentar sus candidaturas al Gobierno de Canarias y el Cabildo de Gran Canaria. El reclamo lo ha lanzado en redes sociales acompañado del hashtag #hastaelcoño.