El presidente del Partido Popular (PP) de Gran Canaria, Carlos Ester, afirmó este sábado que su formación ha puesto en marcha su "maquinaria política" con el objetivo de "sacar a Gran Canaria del pozo en el que permanece desde hace años" y devolverla "al lugar que merece".
Ester hizo estas declaraciones durante un acto celebrado en Las Palmas de Gran Canaria, en el que se reunieron cargos del partido a nivel autonómico e insular, así como afiliados, para dar inicio al nuevo curso político, inaugurado por el secretario general autonómico del PP, Poli Suárez.
El trabajo en los municipios
Durante su intervención, Ester criticó la gestión de los gobiernos de izquierda en el Cabildo y en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, señalando que han dejado a la Isla "anclada en el pasado" y sin proyectos de futuro. Aseguró que el PP está comprometido con el servicio público y que, aunque estén en la oposición en muchas instituciones, sus alcaldes y concejales trabajan por un futuro más próspero para Gran Canaria.
Ester destacó que el municipalismo sigue siendo uno de los ejes centrales del PP, y resaltó el papel de los municipios en la construcción de un futuro mejor para la ciudadanía. "Los municipios son el corazón de nuestras políticas", afirmó, y destacó que su partido se embarca en esta nueva etapa con energía y entusiasmo, con la meta de lograr una gestión política que genere empleo, riqueza y oportunidades.
El apoyo a nivel regional y nacional
El líder del PP insular también subrayó el apoyo que recibe su formación a nivel autonómico, con el liderazgo de Manuel Domínguez, y a nivel nacional, con Alberto Núñez Feijóo. Ester se comprometió a trabajar para que los gobiernos municipales y regionales del partido sigan siendo "la solución a los problemas de Canarias", al tiempo que se continuará fiscalizando las gestiones de los gobiernos actuales, que, a su juicio, "no están a la altura de las necesidades de la Isla".
Por su parte, el secretario general del PP en Canarias, Poli Suárez, reiteró que la formación está preparado para asumir los retos del Archipiélago, y criticó la "desidia" del Gobierno central frente a problemas como la inmigración irregular y la desigualdad territorial tras los acuerdos alcanzados con los nacionalistas catalanes.