Unos cuatro o cinco perros llevan más de una semana encerrados sin comida ni agua suficiente en una vivienda okupada de la calle Febles Campos de Santa Cruz de Tenerife. Los canes no tienen comida ni agua, no paran de ladrar y el hedor que sale por debajo de la puerta es insoportable, tal y como ha denunciado en su cuenta de Instagram Tahiche Pérez, una voluntaria por los derechos de los animales que ha acudido al lugar tras conocer la situación para intentar darles de comer y de beber a los animales por debajo de la puerta.
Tahiche explica a Atlántico Hoy que ella y varios compañeros llevan dos días asistiendo a los perros día y noche. "Llevo dos días sin poder ducharme, ayer me fui de aquí a las cinco de la madrugada", narra a este medio. Además, según cuenta a Atlántico Hoy, en la vivienda también parece haber varias aves. "Creemos que son rapaces por cómo graznan", explica.
Gracias a unas fotografías que han podido tomar del interior del patio desde una azotea, han podido comprobar que hay una jaula de pajaros pequeña y lo que parece un jaulón grande.
Los okupas se han ido
De los dueños no se sabe nada desde la semana pasada. Según le han relatado los vecinos a Tahiche, llevan unos meses okupando la casa, que está vacía desde hace décadas, y hace un tiempo la Policía tuvo que acudir por una fuerte discusión. Pero, aparte de eso, son desconocidos en el barrio.
Tras una semana con los perros encerrados -sospechan que en distintas estancias de la casa-, los vecinos y el grupo de Tahiche han decidido llamar a la Policía Local diariamente para tratar de solucionar la situación, que apenas se mantiene con unas lonchas de jamón cocido y unas gotas de agua dispensadas bajo el portón.
Orden judicial
Cuatro patrullas han aparecido por ahí, la última este mismo jueves, pero, según denuncia Tahiche, la respuesta siempre es la misma: "Redactamos un informe urgente y lo mandamos". Hoy, sin embargo, ha habido una novedad: el primer teniente de alcalde y concejal de Servicios Públicos, Carlos Tarife, ha contactado al grupo y les ha confirmado que este viernes se solicitará al juzgado una orden de entrada y registro.
Aunque parece que la situación va desbloqueándose, el grupo de Tahiche pasará la noche junto a la puerta de la casa donde se encuentran los animales para seguir tratando de alimentarlos.