Camisetas, bolsos, gorras, mochilas, cantimploras, pañuelos, tazas, imanes, pulseras y otros tantos artículos con el emblema de la visita de la Imagen de la Virgen de Candelaria, permanecen expuestos y a la venta en la iglesia de La Concepción para aquellas personas que deseen adquirir un recuerdo de este hecho histórico que no volverá a repetirse hasta dentro de 14 años.
Con el rostro iluminado por el entusiasmo de lo que se avecina, Sara Pérez, voluntaria de la diócesis y responsable de Cáritas en Santa Cruz, comenta a Atlántico Hoy que un grupo de personas voluntarias, nada menos que 280, se ocupará de diversas tareas dentro de la parroquia durante los días en los que se encuentre La Patrona.
Cada 14 años
Atención al público, venta de recuerdos, labores de limpieza, flores, lecturas, preparación de las liturgias y cuidar del templo y de la propia Imagen son algunas de las tareas que acometerá el voluntariado, aunque también estarán situados en puntos claves del recorrido desde Candelaria hasta Santa Cruz, ofreciendo el merchandising que recuerda el año de la llegada a la capital.
“Esta visita formará parte de la historia. ¡La Morenita no volverá hasta dentro de 14 años, hasta el 2039!”, comenta la voluntaria, explicando que todos los artículos que se han preparado para esta ocasión tienen unos precios muy asequibles y su carácter es benéfico.
Cubrir gastos
“La intención es poder recaudar suficiente dinero para poder sufragar los gastos que tiene el desplazamiento. ¡Es un acto de gran envergadura!”, dice.
En cuanto a los casi tres centenares de voluntarios que velarán para que todo discurra según lo previsto, explica Pérez que, con bastante antelación, se hizo un llamamiento al que respondieron estas personas que llegan desde diferentes municipios de la diócesis.
De todo Tenerife
“La mayor parte de los voluntarios son de Santa Cruz, pero vienen de La Laguna, del sur, del norte y de todas partes”, confirma. La misión que tienen estas personas, comenta, es la de “proteger a la Virgen en todo el camino tanto de ida como de vuelta, velar por la Imagen en los diferentes actos que se desarrollen en la Plaza de España y en la plaza de la parroquia, que serán los domingos 12 y 19 de octubre”.
“Se prevé que puedan ser más de cien mil personas las que pasen por esta iglesia en estos 14 días”, enfatiza Pérez, añadiendo que las tres puertas de la iglesia permanecerán abiertas y es necesario que haya personas que “puedan acompañar, explicar y ayudar”.
Momento único
Teniendo en cuenta lo expresado, los voluntarios afrontarán jornadas y horas de mucha dedicación y trabajo “pero lo hacemos con mucho cariño porque es un momento único”.
En el 2018 la Imagen también visitó la capital de la Isla, donde permaneció una semana para trasladarse, posteriormente, al casco de San Cristóbal de La Laguna donde permaneció otra semana. “Recuerdo la fe de tanta gente. Cada visita, cada peregrinación supone una renovación tanto a nivel personal como a nivel de Iglesia”, subraya.
Únicos e irrepetibles
En cualquier caso, tanto el desplazamiento de la Imagen como su permanencia en la capital conlleva una serie de gastos que son cubiertos principalmente por la organización eclesial. En relación a los gastos concretos de la iglesia de Nuestra Señora de La Concepción, “estos son muchos”, apunta.
“Tenemos que contratar un servicio de seguridad y un gran equipo de limpieza que operará cada día a partir de las diez de la noche, momento en el que va a cerrar al público. Además, todos los voluntarios hemos tenido que ser asegurados. Sin duda, esto supone un gasto extraordinario para esta parroquia”.
Reitera Sara Pérez que lo que se recaude de la venta de los pequeños recuerdos de una gran visita. “Son objetos únicos e irrepetibles. No hay otro lugar donde se vendan”, añade, comentando, además, que se han diseñado para la peregrinación en cantidades limitadas.