Después de 18 años sin incorporaciones la orales en el gremio en Santa Cruz de Tenerife, los estibadores en el puerto capitalino anunciaron recientemente la contratación de 18 nuevos empleados para un impulso a una plantilla que había perdido unidades por distintas cuestiones a lo largo del tiempo.
Según ha trasladado el portavoz del comité de empresa de los estibadores en Santa Cruz de Tenerife (Sestife), Víctor Morín, a Atlántico Hoy, la suma de empleados en estos casi dos décadas “ha sido un poco porque las necesidades del trabajo no las han dado”.
Necesidades
En este sentido, aclara que “las necesidades de la plantilla han sido las que han sido con el personal que ha habido y no ha habido necesidad de meter a nadie a nadie más”.
No obstante, como confirma Morín, el de la estiba es un trabajo “muy especializado”, por lo que se requiere mucha formación. “Y mucha gente de aquí no se va porque la formación ha sido demasiada y eso el propio trabajador también lo valora”, puntualiza.
Crisis del 2008
Sin embargo, en estos 18 años ha habido situaciones complicadas. “Sí es verdad que hemos pasado por procesos, por ejemplo, el de la crisis del 2008 hasta el 2016-17 fue un periodo en el que hubo menos trabajo, porque nosotros cobramos por productividad, no por no tener un sueldo fijo”.
Con lo cual, en esa fase estaban cobrando menos, pero las empresas mantuvieron los empleos. “También fue gracias a la colaboración entre los trabajadores y las empresas”, destacó.
Tres mujeres
En total son 15 las nuevas incorporaciones, de los cuales tres son mujeres, que han pasado por un proceso de selección equitativo y muy riguroso hecho por una empresa externa. Ahora se está empezando a darle la formación.
Cuando finalice dicha formación, los estibadores estarán en disposición de ofrecer un servicio de mejor calidad, como el que se venía dando en el sector profesión a las empresas.
Requisitos
“Se les ha pedido titulación de maquinaria externa de lo que es el puerto: máquinas elevadoras, etc. Todo lo que sea maquinaria era valorado. Por su supuesto los carnet de escuela de camión, de guagua si lo tuviesen, de todos los carnes que sean posibles, ahí tenían otro baremo. Prueba como natación, esfuerzo físico, como para colocar barras en los contenedores para trincaje... Grosso modo, era lo que se requería”, argumenta Morín sobre el proceso de selección 18 años después.
Obviamente, en esos 18 años en los que no ha habido entrada de trabajadores, si ha habido salidas, pero puntuales. “Se ha ido retirando porque las necesidades del puerto ahora mismo requerían gente nueva y es verdad que también ha habido jubilaciones”, contextualiza Morín. “Para mantener el número de empleos lo que se está haciendo es un equilibrio entre la gente que se va, las necesidades del puerto y el requerimiento de lo que es la demanda que está en el puerto y los barcos”, agrega.
Situación del sector
Con un total de 170 estibadores, sumados ya los 15 ‘fichajes’, la situación del sector evoluciona con el tiempo en el contexto de los puertos. “Es verdad que la tecnificación cada día es mayor. Sobre todo, con maquinaria, con los equipos informáticos etc. Eso es una realidad”.
Además, Morín valora que “la afluencia de barcos cada día es mayor” y recuerda que en mayo se hizo en Santa Cruz la mayor operación de transbordo con más de 3.000 contenedores. “Provocó que nos pusiéramos también en punta”, afirma.
Navieras internacionales
Asimismo, navieras como Grimaldi se ha incorporado en los últimos tiempos para realizar esas tareas de trasbordo. “Es una naviera importante de tráfico rodado y de contenedores, que lo está haciendo Boluda”, indica.
“Puntualmente tenemos a Maersk y otras empresas navieras. Es un plus porque por lo menos estamos en el mapa de esas navieras y hace que estemos en referencia a nivel mundial también”, agrega como conclusión sobre la buena esperanza del sector.