El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife remodelará por completo la llamada comúnmente zona Orche, nombre que se recoge de la cafetería sita en el lugar y que, aun, se trata de un espacio de aparcamientos y dos calles en distintos sentidos que unen la avenida 25 de julio con la avenida Méndez Núñez, por debajo de la plaza de Los Patos.
Sin embargo, la directriz era clara, esperar a la celebración del Carnaval, pues esta zona es uno de los ambientes más reconocidos de la fiesta y lugar emblemático para el mismo. Ahora, con el broche final del jueves con la presentación de los indicadores del Carnaval las obras comenzarán de forma inminente en los próximos días.
Mejoras futuras
“Habrá que esperar a ver si se cumple las expectativas”, avanza en declaraciones a Atlántico Hoy Orlando, la cara más reconocida de este cuadrilátero y dueño de la cafetería. “Me imagino que cuando estén las obras nos afectará algo, pero después serán un beneficio para todos. Económico para nosotros y para los clientes, porque no pasarán coches ni habrá ruidos. Será otra cosa”, agrega el hostelero.
Con la mirada hacia el pasado más reciente, Orlando valora el último carnaval con el formato viario actual “como todos los años”, confesando que no se puede quejar. “Seguimos teniendo la misma clientela de esta zona, por lo que el ambiente y la gente se mantiene”, señala.
Una plaza
Ahora, en los próximos días arrancan unos trabajos que van a cambiar completamente la cara a este particular ecosistema santacrucero, que realmente va mucho más allá que los carnavales. Cuando finalicen los trabajos, una plaza protagonizará el nuevo espacio que mantendrá a la cafetería como principal motor dinámico de la zona.
¿El nombre de la plaza? “Tendrá otro nombre, pero pongan el que le pongan, me parece que lo acabarán llamando plaza Orche”, comparte con cierta simpatía cuando ya le ha llegado esa popularidad a sus oídos.
A un año vista y realmente con toda una plaza nueva por conocer, Orlando imagina unos futuros carnavales “más o menos igual”, aunque considera que “quizá el espacio será un poco más amplio”, ya que no va a haber carriles de subida y bajadas, además de la supresión de los aparcamientos que cubren el centro.