El número de siniestros con patinetes eléctricos ha aumentado en Canarias durante 2024. Según el informe de Fundación MAPFRE y CESVIMAP, se registraron 27 accidentes en el Archipiélago, un 22,7 % más que en 2023.
De esos siniestros, 11 provocaron lesiones graves y uno fue mortal: un joven de 17 años perdió la vida tras ser atropellado por un turismo mientras circulaba por una carretera, un hecho que pone sobre la mesa las prohibiciones indicadas a los vehículos de movilidad personal (VMP).
Los accidentes con patinetes eléctricos se concentraron sobre todo en Tenerife. La isla lidera el número de incidentes, con 16 siniestros (59 % del total). Le siguen Gran Canaria, con siete (26 %), y Lanzarote, con cuatro (15 %). Por el contrario, no se notificaron siniestros en Fuerteventura, La Palma, La Gomera, El Hierro ni La Graciosa.
Accidentes y vías
En Canarias, la mayoría de los siniestros con VMP fueron colisiones con turismos. No se reportaron atropellos a peatones, caídas ni choques contra mobiliario urbano o vehículos aparcados, situaciones que sí son frecuentes en otras regiones del país.
Este dato contrasta con el panorama nacional, donde los atropellos suponen cerca del 10 % de los accidentes y los choques representan alrededor del 1 %. La ausencia de estos casos en Canarias podría deberse a una mayor concienciación o a la tipología urbana de los municipios afectados.
Aunque la calzada urbana sigue siendo el lugar más frecuente para este tipo de accidentes (33 %), seguida de carreteras y travesías (19 %), donde está prohibida la circulación de patinetes eléctricos. No pueden circular por autopistas, autovías, túneles urbanos ni vías interurbanas, y no deben transportar pasajeros ni superar los 25 km/h.
Perfiles de los conductores
Entre los implicados en accidentes figuran personas de edades comprendidas entre los 12 y los 74 años, todas ellas conductoras de VMP.
La única víctima mortal en Canarias durante 2024 fue un varón de 17 años, que falleció tras colisionar con un coche mientras circulaba por una carretera en Lanzarote. Se trataba de un tramo prohibido para patinetes eléctricos, lo que reabre el debate sobre el control de estas infracciones.
En 2023 también se registró un único fallecido, aunque en ese caso la causa fue una caída. El cambio en el tipo de accidente mortal subraya la importancia de la interacción entre VMP y otros vehículos, en especial en vías no habilitadas para su uso, señala el informe.
A nivel nacional
A nivel nacional, el estudio recoge 396 siniestros con VMPs (un 23 % más que en 2023), con 14 fallecidos —13 conductores de VMP y un motociclista implicado—, lo que supone un incremento del 18 % respecto al año anterior. En total, 240 personas resultaron heridas, de las que 102 sufrieron lesiones graves. El 66 % de los lesionados fueron hombres.
El estudio también detectó 46 siniestros por incendios en patinetes eléctricos — uno de ellos en Las Palmas de Gran Canaria —, en muchos casos relacionados con el mal uso o manipulación de las baterías. Fundación MAPFRE aconseja no alterar el sistema eléctrico, utilizar solo cargadores recomendados por el fabricante y revisar el estado del vehículo tras impactos.
Medidas de seguridad
El informe subraya la importancia de adoptar medidas de seguridad básicas, como el uso obligatorio del casco, chalecos reflectantes —especialmente en el caso de repartidores o usuarios profesionales—, y evitar prácticas de riesgo como frenar con el pie o utilizar auriculares durante la conducción.
A pesar del incremento de siniestros, Canarias sigue sin contar con una normativa específica para la regulación de los vehículos de movilidad personal (VMP) en espacios públicos o en el transporte interinsular, a diferencia de otras comunidades autónomas, sentencia el documento.
Futuras normativas
La Fundación MAPFRE insiste en que la concienciación de los usuarios y el refuerzo de la normativa serán claves para revertir esta tendencia. En este sentido, la DGT tiene previsto que se establezca una edad mínima de 16 años para conducir este tipo de vehículos y se haga obligatorio el uso del casco en todos los casos, no solo en menores.
Datos recientes, como los del Instituto belga de seguridad vial Vías, alertan sobre los riesgos: el 60 % de los hospitalizados tras un accidente con patinete sufre traumatismos craneoencefálicos, lo que refuerza la necesidad de medidas urgentes de prevención.