Ámate denuncia en el Parlamento la espera de cuatro meses para una intervención oncológica

La presidenta de Ámate no entiende que los tiempos de espera sean diferentes en el Hospital Universitario de Canarias y en el Hospital de La Candelaria

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La presidenta de Ámate, Mari Carmen Bonfante. /Efe
La presidenta de Ámate, Mari Carmen Bonfante. /Efe

“Una persona que se encuentra un bulto en el pecho tiene que pasar por el proceso de llamar a su médico de cabecera, esperar una semana para conseguir la cita con este y, luego, derivarlo al ginecólogo de residencia en el hospital. Se tardan otros tantos días y luego lo envían a realizarse una mamografía o ecografía. Ya ha pasado un mes hasta que regresas a ginecología y le dicen ‘sí, usted tiene cáncer de mama, la vamos a operar’”. La presidenta de la Asociación de Cáncer de Mama de Tenerife (Ámate), Mari Carmen Bonfante, ha denunciado en el Parlamento de Canarias las largas esperas que sufren las mujeres para operarse sus tumores mamarios, más de los dos meses que indican las estadísticas oficiales en muchos casos.

Además, según ha dicho Bonfante en una comparecencia en la Comisión de Sanidad del Parlamento de Canarias, no se entiende que los tiempos de espera sean diferentes en el Hospital Universitario de Canarias (HUC), en La Laguna, y en el Hospital de La Candelaria, en Santa Cruz de Tenerife.

La presidenta de la Asociación de Cáncer de Mama de Tenerife (Ámate), Mari Carmen Bonfante, ha denunciado en el Parlamento de Canarias las largas esperas que sufren las mujeres para operarse sus tumores mamarios. /Efe
La presidenta de la Asociación de Cáncer de Mama de Tenerife (Ámate), Mari Carmen Bonfante, ha denunciado en el Parlamento de Canarias las largas esperas que sufren las mujeres para operarse sus tumores mamarios. /Efe

Tiempos de espera diferentes

“Nos llama la atención que los tiempos de espera sean distintos entre el HUC y el Hospital de la Candelaria. Una paciente tiene que esperar 10 días en el HUC para saber si tiene cáncer o no y en La Candelaria 29 días”, asegura Bonfante. "Si naces en La Laguna tienes menos tiempo de sufrimiento que si naces en Santa Cruz", ha denunciado. 

Fuentes de Sanidad, sin embargo, aseguran que el tiempo medio de espera de un paciente que tiene que ser intervenido quirúrgicamente es de 35 días. Pero Bonfante se pregunta de dónde salen estas estadísticas. Desde que a una mujer o a un hombre se le detecta un bulto pueden pasar "hasta tres, cuatro y cinco meses" para ser operadas, desmintió la presidenta de Ámate. 

Quirófanos de tarde

Para agilizar las operaciones, los médicos, con el apoyo de Ámate, proponen que se abran los quirófanos por la tarde pero la respuesta, dijo Bonfante, siempre es la misma: "falta dinero". Según la asociación ‘El defensor del paciente’, la demora en la lista de espera quirúrgica es la mayor en 20 años. El año pasado recibió 288 quejas por presuntas negligencias médicas en Canarias, donde la lista de espera quirúrgica está "desbordada a todas luces" y es la tercera peor del país. 

Bonfante explica que “los médicos de La Candelaria han pedido quirófanos de tarde para tratar los pequeños tumores y aligerar la lista de espera pero no se lo permiten”. La realización de mamografías preventivas antes de los 50 años es otra de las reivindicaciones de Ámate, como también la mejora de las instalaciones para cuidados paliativos, en las que no se garantiza la intimidad para morir dignamente. "Todos merecemos algo más para la última hora", afirmó.

Hospital del Sur

La presidenta de Ámate denunció también el inmerecido trato a las pacientes del sur de Tenerife, donde viven 340.000 personas, que no pueden recibir quimioterapia sino en los hospitales del área metropolitana, cuando en lugares como La Palma, con 85.000 habitantes, sí se puede. La distancia desde el sur de Tenerife obliga a las pacientes a coger una guagua a las cinco de la mañana para recibir quimioterapia, y regresar a la cinco de la tarde con los efectos secundarios del tratamiento encima. "No se lo merecen", insistió Bonfante.

“Para nosotras también es muy importante la espera en el tiempo para la solución del grado de discapacidad”. Explica que una mujer con cáncer de mama tiene que esperar dos o tres años para que le den el grado. “Si se lo dieran inmediatamente, aunque fuera revisable al año, podría recibir las ayudas necesarias”, concluye.