En el horizonte cercano, miles de funcionarios en Canarias se enfrentarán a un cambio significativo en su acceso a la atención sanitaria.
Un anuncio reciente ha puesto fecha al final de una relación que durante años ha definido la cobertura médica de los mutualistas de Muface en la región.
Adeslas pone fin a su atención
La compañía de seguros médicos Adeslas ha confirmado oficialmente que dejará de prestar servicios a los mutualistas de Muface a partir del 31 de enero de 2025. Esta decisión afecta tanto a los mutualistas de Canarias como a los del resto de España, quienes tendrán que elegir entre ser atendidos por la Seguridad Social o contratar un seguro privado por su cuenta.
La razón detrás de este movimiento radica en la caducidad del acuerdo actual entre Muface y Adeslas, ya que la última licitación para el período 2025-2026 quedó desierta.
Reacciones y futuro incierto
El sindicato CSIF (Central Sindical Independiente y de Funcionarios) ha criticado duramente la decisión de Adeslas de anunciar este cambio antes de que el Gobierno tenga la oportunidad de lanzar una segunda licitación, que podría incluir mejoras económicas respecto a la propuesta inicial.
Los mutualistas de Canarias, acostumbrados a recibir atención médica privada a través de Adeslas, ahora enfrentan un escenario incierto, con dos opciones principales:
- Cambiarse al sistema público de la Seguridad Social.
- Contratar un seguro médico privado de forma independiente, asumiendo el coste íntegro.
Impacto en Canarias
Este cambio tendrá un impacto notable en Canarias, donde muchos mutualistas dependen de la red sanitaria privada. La decisión podría aumentar la presión sobre la Seguridad Social, especialmente en las áreas más pobladas como Tenerife y Gran Canaria.
Además, el fin del acuerdo también podría dejar a algunos mutualistas con menos opciones de acceso a especialistas y servicios médicos de alta demanda en el sistema público.
Qué se espera ahora
El Gobierno aún tiene la oportunidad de lanzar una segunda licitación, que podría mejorar las condiciones económicas para las aseguradoras y reactivar el interés de Adeslas y otras compañías. Sin embargo, el tiempo apremia y la incertidumbre genera preocupación entre los mutualistas, que esperan una solución antes de que llegue la fecha límite.
Con el 31 de enero en el calendario como punto de inflexión, Canarias se enfrenta a un cambio significativo en la atención sanitaria de miles de funcionarios, marcando el fin de una era y el inicio de nuevos retos para todos los afectados.