La primera rondalla del carnaval de Tenerife compuesta por mujeres fue también una de las primeras agrupaciones de este tipo de cualquier género en la isla: se fundó en 1921 y participó en concursos durante los carnavales de 1927 y 1928. Sin embargo, es una gran desconocida para los canarios, y por esa razón, el periodista e investigador lagunero Julio Torres quiere reivindicarla en el libro La Laguna, siglos de carnaval, que saldrá a la venta próximamente.
Este grupo se llamó La Estudiantina Normalista, y en ella participaron alrededor de 50 estudiantes de la Escuela Superior de Maestras de La Laguna (La Normal). La comandaba Elpidia Rodríguez, que también era la directora de la escuela, y sus integrantes vestían el típico traje de tuno.
La cantina
Elpidia Rodríguez llegó a La Laguna en julio de 1910 como profesora de la Escuela. Ese mismo año asume la dirección de la misma, y más tarde fundó la Cantina Escolar y el Ropero Escolar de La Laguna, destinados a proporcionar alimentación y vestimenta a niños desfavorecidos, según cuenta el escritor Rafael Asencio, experto en la historia de la Tuna.
A diferencia de otras rondallas de la época, La Estudiantina no solo actuaba en eventos festivos, sino que tenía un fuerte compromiso social: sus actuaciones servían para recaudar fondos destinados a la manutención de la cantina. Su música combinaba piezas tradicionales con composiciones adaptadas para el carnaval y su repertorio se basaba en géneros populares de la época.
Un siglo después
Habría que esperar hasta el siglo XXI para que volviera a haber una rondalla de mujeres en el carnaval de Tenerife, también de La Laguna: Las Valkirias, creada en 2013. Aunque muchos las consideran la primera rondalla femenina del carnaval de Tenerife, Torres defiende, con su investigación que la primera "fue La Estudiantina Normalista".
Por el camino sí ha habido otras agrupaciones de mujeres, como murgas, que llevan teniendo participación femenina, al menos, desde los años 70. Destacan Las Desconfiadas, fundadas en los 70 en Arafo, Tenerife y Las revoltosas, majoreras que llevan más de 40 años en la escena carnavalera canaria y que son consideradas como la primera murga formada íntegramente por mujeres.
