El exfutbolista Sergio Marrero, de nuevo con problemas judiciales por un caso de robo con fuerza

El exjugador de la UD Las Palmas y del Atlético de Madrid fue detenido en mayo de 2020 y el caso se encuentra actualmente en el Juzgado de Instrucción Nº6 de Las Palmas de Gran Canaria

G. Díaz Medina / Martín Alonso

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Sergio Marrero posa con Maradona antes de un partido de Copa del Reye entre la UD Las Palmas y el FC Barcelona.
Sergio Marrero posa con Maradona antes de un partido de Copa del Reye entre la UD Las Palmas y el FC Barcelona.

A mediados de mayo de 2020 los canarios empezaban a salir de sus casas tras más de dos meses confinados por la pandemia de Covid. Eran tiempos de cambio de niveles sanitarios y de mucha incertidumbre. Mientras muchas personas volvían a respirar la brisa del mar, el aire fresco del campo y los restaurantes subían sus persianas, algunas volvían a las andadas, y esas andadas no eran otras que volver a delinquir, algo que no habían podido hacer durante el tiempo que estuvieron encerrados en sus casas. 

Durante esos días de esperanza, Sergio Marrero, exjugador de la UD Las Palmas y del Atlético de Madrid, fue detenido junto a tres hombres acusado de un robo con fuerza en unos áticos de lujo, que se alquilan como viviendas vacacionales en la zona de la playa de Las Canteras, en Las Palmas de Gran Canaria.

Detenido en La Isleta

Un albañil que había estado trabajando en los inmuebles y las conocía al dedillo, se puso en contacto con sus compinches, entre ellos Sergio Marrero y presuntamente decidieron robar todo lo de valor que hubiera allí. Ayudados por unas palanquetas mecánicas se introdujeron en los áticos y se hicieron con los televisores de alta gama y todos los electrodomésticos que pudieron. Además, no dudaron en utilizar las casas para pasar un buen rato y consumir estupefacientes en su interior. 

El 15 de mayo de 2020, el albañil, Sergio Marrero y dos hombres más fueron detenidos. A Sergio lo atraparon dos policías en el barrio de La Isleta. Después de explicarle el motivo de su detención y sus derechos, pidió un abogado del turno de oficio y le permitieron llamar a su mujer. Los cuatro hombres pasaron a disposición del Juzgado de Guardia y ese mismo día fueron puestos en libertad con cargos. Ahora, el Juzgado de Instrucción Nº6 de Las Palmas de Gran Canaria está tomando declaración a los investigados. El futuro del exfutbolista de élite Sergio Marrero, si es considerado culpable en un próximo juicio, podría ser la cárcel.

Debut y marcajae a Maradona

El 8 de febrero de 1984, Héctor Núñez –entrenador uruguayo que dirigió a la UD Las Palmas en la temporada 83/84– hizo debutar a Sergio Marrero con el primer equipo amarillo en el Estadio Municipal de Linarejos. Fue en un partido de Copa del Rey contra el Linares CF. Ese día, formó en la defensa junto a Julio Durán, Felipe y Mayé en un partido que se resolvió con victoria del representantivo grancanario con gol de Pepe Juan. Aquel fue el primer encuentro de un joven, procedente del filial, que luego disputó 140 partidos oficiales más con la Unión Deportiva a lo largo de cinco campañas.

Durante la temporada de su debut con Las Palmas, Marrero destacó en un escenario grande: en una eliminatoria de semifinales de la Copa del Rey contra el FC Barcelona. Disputó los dos partidos, resueltos en una tanda de penaltis –tras derrota amarilla (2-1) en el Camp Nou y victoria de la UD (1-0) en el Estadio Insular–, en los que se cruzó sobre el terreno de juego con un mito como Diego Armando Maradona. Cuenta la leyenda que el astro argentino alabó el marcaje que le realizó Sergio en ambos duelos –por eficaz y por no caer en la reiteración de patadas, uso y costumbre de la época para frenarle–. Eslos dueos quedaron inmortalizados en una foto de ambos antes del encuentro disputado en Gran Canaria.

Ascenso y traspaso al Atlético

Marrero fue un futbolista recurrente en las alineaciones de Roque Olsen el año del antepenúltimo ascenso de la UD Las Palmas, durante el ejercicio 85/86, a Primera División. A lo largo de los tres años siguientes en la máxima categoría fue titular indiscutible en el equipo amarillo. Su rendimiento llamó la atención del Atlético de Madrid en verano de 1988, tras el descenso del representativo grancanario. Jesús Gil, entoces presidente del club colchonero, pagó 30 millones de pesetas por su traspaso y le ofreció al futbolista un contrato por tres años –a cambio de 72.000 euros por ejercicio–. 

El paso de Marrero por el Atlético marcó su final como futbolista profesional. Allí sólo disputó cuatro encuentros y se destapó lo que era un secreto a voces en el mundo del fútbol y los bajos fondos de Las Palmas de Gran Canaria: su adicción a la drogas. De aquella época queda en el recuerdo una lamentable frase de Fernando Arencibia, presidente en ese momento de la UD Las Palmas, sobre el jugador y su venta al equipo rojiblanco. "Le endilgué un drogadicto a Gil", afirmó. Rescindido su contrato con el cuadro colchonero, su última parada fue el CD Maspalomas en Segunda B –allí sólo jugó 15 partidos–.

Retirado del fútbol, Marrero –habitual en las calles de La Isleta, barrio al que llegó con su familia tras vivir en el Polvorín y el Polígono de San Cristóbal– cayó en el pozo. Fue arrestado en varias ocasiones –por delitos como robos o tráfico de drogas– y dio con sus huesos en la cárcel. Ahora, después de años errantes con su vida, vuelve a estar en fuera de juego. Y, una vez más, la sanción sería grave: volver a prisión.