La mujer que asestó 62 puñaladas a su vecina en la Paterna se enfrenta a 27 años de cárcel

Yaiza R.F. está acusada de un presunto delito de asesinato y de otro de robo con violencia en casa habitada. En el momento de los hechos, la mujer padecía una fuerte adicción a las drogas

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La mujer que asestó 62 puñaladas a su vecina en la Paterna se enfrenta a 27 años de cárcel. / ATLÁNTICO HOY
La mujer que asestó 62 puñaladas a su vecina en la Paterna se enfrenta a 27 años de cárcel. / ATLÁNTICO HOY

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Las Palmas juzgará con un tribunal del jurado a Yaiza R.G. por asestar hasta 62 puñaladas a Rosa María Castellano Suárez de 70 años y vecina de ella. La mujer está acusada de un presunto delito de asesinato y de otro de robo con violencia en casa habitada por los que podría ser condenada a 27 años de cárcel.

La acusada vivió muchos años en el mismo edificio que Rosa, situado en la calle Manuel de Falla, en el barrio de La Paterna en la capital grancanaria. Yaiza vivía en el noveno y Rosa en el octavo. “La relación entre ambas era fluida, acudiendo la acusada a la casa de Rosa María, quien la ayudaba dándole alimentos para ella y sus hijos menores”, detalla el Ministerio Fiscal en su escrito de acusación.

Primero le robó

En el mes de junio de 2019 Rosa denunció la sustracción de dos electrodomésticos. Las investigaciones policiales dieron  como resultado que había sido la acusada quien los había vendido en un “Cash Converters”. Desde ese momento, Rosa no permitía a la acusada acceder a su domicilio y evitaba tener trato con Yaiza, pese a lo cual ésta siguió tocando en casa de su vecina o enviando a sus hijos menores con el fin de lograr que le diera dinero o alimentos. 

“Sobre las 21:20 horas del día 2 de noviembre de 2021, sabiendo que Rosa se encontraría sola en su domicilio, pues había enviudado unas semanas antes, la acusada tocó en la puerta de la vivienda de esta, abriendo Rosa, probablemente pensando que quien tocaba era otra vecina que la había visitado minutos antes, como hacía cada noche desde el fallecimiento del marido de esta”, detalla la Fiscalía. 

Buscaba cosas de valor

De las investigaciones llevadas a cabo por el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional, se deduce que una vez abierta la puerta, la acusada entró en la vivienda con rapidez hasta llegar al salón y que con un cuchillo que, bien traía con ella, bien encontró en el domicilio, atacó a Rosa de forma salvaje, propinándole múltiples cuchilladas en diversas partes de su cuerpo, dejando a Rosa malherida y sangrando abundantemente. 

“Actuó la acusada de tal manera con intención de tener acceso libre a la vivienda y lucrarse de forma ilícita, como así hizo, dirigiéndose al dormitorio principal de la vivienda y buscando cuanto de valor encontrase, apoderándose de varios anillos, una cadena y una pulsera, todo ello de oro; percatándose la acusada en algún momento de que Rosa María se había puesto de pie, fue a la cocina, cogió un segundo cuchillo y con intención de acabar con la vida de esta, le propinó más puñaladas”, relata el escrito de acusación.

Los investigadores sospechan que Yaiza cogió una bolsa de basura y metió en su interior los objetos que ya había sustraído, además de una videocámara, un teléfono móvil y distintas piezas de ropa y calzado masculino que había apartado la víctima para donar. 

62 puñaladas

“Rosa María recibió de la acusada un total de 62 lesiones derivadas del uso de arma blanca, la gran mayoría en cara y cuello, que le produjeron la muerte por insuficiencia respiratoria derivada de la sección parcial de la laringe y las lesiones del pulmón derecho así como del sangrado masivo”, describe la Fiscalía. 

Las cosas se le complicaron a Yaiza cuando iba a salir de la vivienda porque se encontró con que la puerta de entrada estaba atascada. Yaiza desmontó el pomo de la puerta por la fuerza y los ruidos que provocó alertaron a los vecinos de la planta, que salieron al descansillo pensando que era Rosa quien trataba de salir de la casa. 

“Como quiera que no recibían contestación desde el interior de la vivienda, una de las vecinas llamó al teléfono fijo de la vivienda de Rosa María, cogiéndolo la acusada, diciéndole ser sobrina de Rosa y que esta se encontraba en la ducha. Cuando un vecino logró abrir la puerta con un escoplo, la acusada salió corriendo de la vivienda llevándose consigo la bolsa conteniendo los objetos sustraídos y diciéndole a los vecinos que llamaran a la policía”, reza el escrito.

Toxicómana

En el momento de los hechos, Yaiza era toxicómana y en base a tal dependencia, la Fiscalía estima que su capacidad volitiva estaba levemente disminuida para aquellos hechos encaminados a obtener sustancias estupefacientes. 

Los objetos sustraídos y no recuperados han sido pericialmente tasados en 9.902 euros las joyas, en 105 euros el teléfono móvil y en 55 euros la cámara de vídeo. 

Por el delito de asesinato la Fiscalía solicita veintitrés años de prisión y por el de robo con violencia en casa habitada, pide cuatro años y seis mese de prisión. “Además, la acusada deberá indemnizar al hijo único de la fallecida, en la cantidad de 120.000 euros en concepto de daño moral e indemnización por los objetos sustraídos y no recuperados más los intereses legales”, concluye el escrito del fiscal.

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