Tener que irse fuera del Archipiélago por un trasplante de pulmón se ha acabado para los canarios

El Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín ha puesto en marcha un programa de trasplante de pulmón que aporta calidad de vida y aumenta la supervivencia de los pacientes

Guardar

Imagen de un trasplante / EFE
Imagen de un trasplante / EFE

En los últimos cinco años, 80 pacientes canarios han tenido que viajar a la Península para someterse a un trasplante de pulmón con una espera media de 16 meses, según datos de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias. Para evitar esto, el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín ha puesto en marcha un programa de trasplante de pulmón que aporta calidad e incrementa la supervivencia del paciente. 

Hasta el momento, se han realizado dos trasplantes a pacientes con la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) —enfermedad pulmonar común que reduce el flujo de aire y causa problemas respiratorios— que están evolucionando favorablemente e, incluso, uno de ellos está dado de alta. “Cuando el programa funcione a pleno rendimiento, entre 20 y 25 pacientes se beneficiarán anualmente de la realización de un trasplante pulmonar”, ha asegurado la consejera de Sanidad, Esther Monzón

Presentación del programa de trasplante de pulmón / EFE
Presentación del programa de trasplante de pulmón / EFE

Supervivencia 

“Estamos ante un trasplante de órgano sólido más grande del cuerpo por encima del riñón, del hígado y del corazón”, explica el doctor Pedro Rodríguez, cirujano responsable del programa, durante la rueda de prensa de presentación del mismo. “Es el más sensible a la isquemia, a las infecciones y al rechazo, pero también ofrece a pacientes que iban a fallecer en menos de dos años una supervivencia del 80% al año, del 60% a los cinco y del 40% a los 10 años”. 

De esta forma, “estamos ofreciendo a los pacientes supervivencia y calidad de vida”, asegura el doctor. Aunque “es un proceso largo, desde que el paciente baja a quirófano hasta que sube a la unidad de cuidados intensivos, tarda entre 12 y 15 horas de procedimiento quirúrgico”. 

Quedarse en casa

Un paciente canario que debía ser trasplantado tenía que estar entre dos y tres años viviendo en el exterior: los meses en lista de espera para conseguir el órgano, la realización del trasplante y la recuperación y control posterior. No obstante, no todas las personas pueden ser capaces de enfrentarse a esta intervención quirúrgica.

"Hay pacientes que llegan con ilusión, pero no hay opciones porque el riesgo de fallecer es superior”, explica el doctor César García de Llanos, neumólogo. Aclara que existen ciertos criterios de derivación como las perspectivas de vida, la calidad de vida limitada, que no cuente con enfermedades graves —como, por ejemplo, oncológicas, el cáncer de pulmón no es una afección trasplantable— o la edad, entre otras. “Se realizan pruebas cardiológicas, analíticas y lo necesario para disminuir el riesgo de trasplante”. Actualmente, hay siete pacientes en Canarias que están pendientes de finalizar sus estudios para ver si son candidatos óptimos para la intervención. 

Donar

La clave para cualquier tipo de programa de trasplante se encuentra en los donantes. “El tópico de que sin donantes no hay trasplante es una realidad absoluta”, concluye Vicente Peña, coordinador hospitalario. “Una de las razones por las que Canarias puede realizar esta intervención es porque cada vez hay más gente solidaria que decide ayudar después de su muerte”. Es más, en 2022 el Archipiélago contó con 54,8 donantes por millón de habitantes, lo que sitúa a las Islas por encima de la media nacional —que es de 46,3%—. 

Al trasplante de pulmón se une de forma simultánea el de corazón. “El Hospital Doctor Negrín realizó la intervención a un paciente de 66 años, lo que demuestra la capacidad del centro para enfrentarse simultáneamente a la realización de dos trasplantes de alta complejidad”, concluye el director gerente de la clínica, Miguel Ángel Ponce.