El 4 de marzo de 2020, el alcalde de Granadilla de Abona, José Domingo Regalado, colocó la primera piedra de las obras de las salas velatorio en el casco urbano del municipio. Los trabajos, encargados a la empresa Desarrolla Obras y Servicios S.L., tenían un presupuesto algo superior al millón de euros y un plazo de ejecución de 16 meses.
En julio de 2021, fecha para la que estaba originalmente previsto estrenar la construcción, los andamios seguían puestos. Ahora, en enero de 2023, las salas velatorio siguen sin inaugurarse, aunque queda poco para ello.
Aparcamientos y canalizaciones
Desde el Ayuntamiento de Granadilla de Abona explican a Atlántico Hoy que el edificio ya está acabado y que se ha retrasado al tratarse de una "obra mayor más compleja". Lo que queda, pues, son los exteriores. "Se está finalizando la zona de aparcamientos y se está trabajando en la canalización de aguas de lluvia. Se está trabajando en la parte trasera, que no se ve desde la calle", explica el consistorio.
No hay una previsión exacta de cuándo acabarán estos remates, pero el ayuntamiento asegura que, tan pronto como se terminen, abrirán las salas velatorio.
Una demanda histórica
El proyecto pretende, según indicó el ayuntamiento al iniciarlo en 2020, "dar respuesta a una necesidad y demanda histórica por parte de los vecinos de esta parte del municipio" , que tiene que trasladarse a otras salas ubicadas en los núcleos de Charco del Pino y El Médano a falta de un velatorio en el casco urbano de la ciudad.
Para poder llevarlo a cabo, el consistorio tuvo que modificar en 2018 el Plan General de Ordenación vigente desde el año 2005, que solo permitía la instalación de equipamientos destinados a servicios mortuorios en el ámbito del cementerio municipal y terrenos colindantes.