El flamenco y el jazz son dos géneros muy característicos, muy suyos e identificables con solo escuchar unos segundos. Sin embargo, ambos convergen en la música de Antonio Lizana, como si nada, como si estuvieran hechos el uno para el otro, entre las palmas del músico y su saxofón.
Ahora el compositor, saxofonista y cantaor sale de su zona de confort junto a la Perinké Big Band para subirse al escenario y ofrecer un concierto inédito, “una recapitulación de mis distintos discos”. Será como “un grandes éxitos, pero versionado por la Big Bang”, cuenta Lizana emocionado a Atlántico Hoy ante la idea de verse este fin de semana en el Alfredo Kraus junto a 20 músicos tocando sus canciones.
Una doble pasión
Desde pequeño, Lizana ha vivido la pasión por estos dos géneros musicales que la vida le puso “delante un poco”. Su primer flechazo llegó a través de la colección de vinilos de rock y blues de los años 70-80 que tenía su padre. Ya con 8 años sabía que quería ser músico. “Quería tocar la guitarra eléctrica o algún instrumento de estos”, pero al entrar en el conservatorio se encontró con el saxo.
El ambiente flamenco llegó después poco a poco. “Cuando tenía 14 años conecté con un círculo de amigos que todos eran flamencos y entonces ahí fue cuando empecé a meterme en profundidad”, pero vivía con esa “sensación de que pertenecía a eso y no” porque “mi instrumento pertenecía a otro estilo”. Nace así una “doble pasión”, “en lo musical, socialmente era flamenco, pero en mi casa estudiaba jazz”.
Fue en la composición y en la improvisación donde Lizana encontró el punto de convergencia entre sus dos pasiones. “Cuando intentaba componer música de jazz, todas las melodías que me salían tenían como un carácter andaluz flamenco”, relata el artista, que dio el paso a la experimentación probando “a hacer este tema pero en vez de swing por bulerías”, llegando al día de hoy donde se ha posicionado como figura referente del nuevo flamenco-jazz.
No para la pata
Su primer disco salió hace 12 años, pero su viaje musical comenzó desde que tenía 14 y 15 años, relata, pues es ahí cuando se adentra en la música y comienza a colaborar con otros músicos a lo largo de su carrera, como Alejandro Sanz, Chambao, India Martínez o Jorge Drexler.
Y estos años le han servido para mucho, no para la pata de un lado a otro entre viaje y viaje para sus conciertos, en los últimos tres años ha realizado trescientos conciertos por más de 30 países. “He pasado entre febrero, marzo y abril solo una semana en mi casa”, ríe el músico. Estos viajes le han permitido conocer a mucha gente. “Cuando viajas con la música es diferente a cuando haces un viaje tú solo porque la música te pone a gente alrededor que está en sintonía, culturalmente inquieta y con mente abierta”, expresa Lizana, quien agradece “la gran fortuna” de seguir aprendiendo al tocar con músicos “increíbles” de todas partes del mundo.
Llevar el flamenco por el mundo
Dando volteretas por el mundo, bromea con que se ha convertido un poco en un misionero del flamenco y el jazz. Procedente de Cádiz, cuando toca jazz en Andalucía, donde “no hay tanta tradición”, siente que está brindando a su gente, la oportunidad de escuchar a músicos de fuera.
“Donde sí me siento un poco como mostrando algo más allá es al llevar el flamenco por todo el mundo”, relata Lizana. Aunque hay tradición de muchos años de artistas flamencos “que viajan por ahí”, representaban “cuadros flamencos más tradicionales”, “pero la manera que yo lo hago es muy personal y cercana”. Cuando toca en un teatro en Chicago, por ejemplo, “me da muchísima fuerza y me quita nervios porque la gente no sabe nada de lo que es flamenco, que en mi tierra lo cantamos todos los días después de comer, así que puedo estar tranquilo porque vienen a escuchar mi cultura”, expresa el músico.
Tocar con una gran banda
Ahora le toca el turno a Canarias, en concreto en Gran Canaria, en el Alfredo Kraus, donde se subirá al escenario junto a la Perinké Big Band, que celebra su 20 aniversario. “Normalmente toco con mi grupo y me han invitado a hacer un repertorio de música adaptada a esta gran banda”, apunta. “Tengo muchas ganas de escuchar como suena”, expresa emocionado. Con él han venido José Manuel León, a la guitarra y Shayan, a la batería. Y días previos al concierto, no han parado de reunirse y ensayar para “transmitir lo que es la música flamenca tradicional y explicar cómo van esos ritmos”.
Y después de otorgar un concierto inédito junto a la banda canaria dirigida por Ximo Martínez, su viaje continuará. “De aquí me voy a Valencia, después a Málaga, Madrid, Logroño y Francia, y estoy hablando solo hasta mediados de mayo. A partir de ahí ya el verano mucho en Francia y Alemania voy a estar ahí la reunión, después voy a Japón en septiembre”, enumera Lizana, quien dando volteretas por el mundo, lleva sus dos pasiones a los escenarios.
Sus fechas en Canarias
Gran Canaria: estará en el Auditorio Alfredo Kraus el 12 y 13 de abril a las 20:30 horas.