Aitor Sanz duele. El capitán del CD Tenerife es la viva muestra del ostracismo fruto de un calvario en forma de lesión, que no parece tener cura. El siguiente paso que ha dado el madrileño, tras un tratamiento conservador que ha resultado en balde, ha sido someterse a una intervención quirúrgica en la que se le realizó una limpieza del tendón de Aquiles dañado.
Fue operado en Vitoria este lunes y este miércoles se dejó ver por El Mundialito, aunque lo hizo con muletas y una escayola. Además, su vuelta a los terrenos de juego se vuelve a retrasar, esta vez hasta la próxima pretemporada. Desgraciadamente para el madrileño, la temporada 18-19 la culminará totalmente en blanco.
Fue operado en Vitoria este lunes y este miércoles se dejó ver por El Mundialito, aunque lo hizo con muletas y una escayola. Además, su vuelta a los terrenos de juego se vuelve a retrasar, esta vez hasta la próxima pretemporada. Desgraciadamente para el madrileño, la temporada 18-19 la culminará totalmente en blanco.
⚽️🏴El #CDTenerife se ejercita en El Mundialito. Aitor Sanz está de vuelta, con muletas
▶️https://t.co/yVaKxUNlBp pic.twitter.com/XLrRUJZZ9l
— ELDORSAL (@ELDORSAL) 27 de febrero de 2019