"Después de destituir a Oltra, le dije a Concepción que estuviese para lo que hiciese falta. Pero de nada sirvió porque no tuve respuesta. Ahora mismo es un tema más mental que futbolístico. Es cuestión de entrar al vestuario, dejar las cosas claras... Veo que hay futbolistas que se van a otros destinos y tal vez no estén del todo implicados. El problema fundamental es de actitud. Jugándose lo que se están jugando, tiene que notarse. Ojalá estuviera disponible Aitor Sanz, que es un emblema como Suso. Entre los dos, arrastrarían a todo el vestuario", sugirió.
Cherubino se mostró "muy preocupado" por la situación clasificatoria pero aclaró que no es pesimista. También dijo que él tendría "muy claro quiénes tienen que jugar", y destacó que en estas situaciones hay jugadores que tienen un menor grado de compromiso que otros.
También sugirió que el club "está usando la figura de Cristo Marrero como segundo entrenador, pero no es un cargo donde tengas la última palabra ni pintes mucho". "Respeto mucho los conocimientos y trayectoria del míster que han traído, pero para cuatro partidos no parece la mejor solución", anotó.
Para Pier, existe esperanza "por la magia del Heliodoro, el apoyo de la afición y el coraje de algunos pesos pesados como Suso". "Pero bajar sería una debacle", puntualizó. Por último, y en cuanto a la manifestación de las peñas, desterró la idea de que pueda afectar o descentrar a los futbolistas. "Entiendo a los aficionados que libremente quieran protestar. Son muchos años de mala gestión y la gente está decepcionada. Que nadie se confunde: esa iniciativa no perjudica a los jugadores porque una vez entren al Heliodoro, los aficionados van a estar a muerte y dejándose la garganta en cuanto empiece el partido".