Noble Corporation, una de las principales compañías del sector de la perforación, ha vendido dos buques que llevan atracados en el Puerto de Las Palmas desde 2018, sin contratos o servicios de extracción de gas y de petróleo. Se trata de la Pacific Meltem y la Pacific Scirocco, que fueron construidas en 2011 y 2014, respectivamente.
La multinacional anunció en febrero que iba a retirar ambas unidades del sector, tanto por su elevado coste de mantenimiento, pues llevan casi una década sin contratos y no hay perspectivas de mejora, como por la necesidad de adaptar la oferta a la demanda. Esto último es habitual para aliviar la presión sobre el mercado del petróleo, que sufre tensiones cuando hay más buques disponibles para perforar que pozos activos.
Dos opciones
Noble puso los barcos en venta para llevarlos al desguace o reconvertirlos a otro sector, según anunció la empresa en un comunicado. La opción de la reconversión es la que finalmente se ha impuesto en el mercado internacional, explican fuentes conocedoras de la operación de compraventa.
La Pacific Meltem y la Pacific Scirocco han sido adquiridas por una empresa que las destinará al tendido de cables submarinos en Croacia, tanto para el transporte de datos como de energía.
Certificaciones
Tras cerrarse la venta de ambas naves, la Scirocco zarpó el pasado 24 de junio a Funchal, en Portugal, y se dirige ahora a Tenerife ShipYards, en el puerto de Santa Cruz, donde tiene un preacuerdo con Hidramar para revisar la unidad en sus instalaciones. Los equipos trabajan en los permisos para navegar y trabajar en alta mar.

El astillero tinerfeño, además, negocia para hacerse con el contrato de la reconversión completa del buque, lo que podría dejar importantes beneficios en la industria local de Santa Cruz.
El servicio incluiría también a la Pacific Meltem, que sigue atracada en el Puerto de Las Palmas. La negociación aún no está cerrada porque la idea inicial del nuevo armador es realizar la adaptación en Croacia, pero los responsables de Hidramar pelean por cerrar el acuerdo.
Cables submarinos
En cualquier caso, será Tenerife ShipYards quien revise ambas unidades para afrontar la travesía hasta el mar Adriático, donde tienen previsto trabajar en el tendido de cables entre la costa croata y el continente.
Y es que el astillero tinerfeño está en racha. No sólo espera un dique flotante con capacidad para trabajar con barcos más grandes a los habituales en Canarias, sino que recientemente trabaja en la reactivación de la Floatel Reliance, una plataforma construida para alojar tripulaciones de la industria offshore.
Cambio de puerto
La Reliance llevaba casi una década atracada, sin encargos para trabajar, pero en Santa Cruz de Tenerife, no en el Puerto de Las Palmas, donde sí estaban la Pacific Meltem y la Pacific Scirocco.
Lo curioso de esta nueva operación es que los buques se van al puerto tinerfeño en lugar de contratar sus servicios en la capital grancanaria.