Preocupación por la vuelta de la noche al Puerto de Las Palmas: "La época de Sotavento fue de locos". / AH
Preocupación por la vuelta de la noche al Puerto de Las Palmas: "La época de Sotavento fue de locos". / AH

Preocupación por la vuelta de la noche al Puerto de Las Palmas: "La época de Sotavento fue de locos"

La Policía Portuaria advierte a Puertos del Estado que necesita más medios de defensa, no restringir los actuales, para afrontar con seguridad el nuevo modelo de ocio nocturno que se quiere implantar en los muelles Sanapú y Santa Catalina

El regreso de la música y los bares de copas al Puerto de Las Palmas preocupa a la Policía Portuaria, que se siente "indefensa" ante la llegada de un nuevo modelo de ocio nocturno en la capital grancanaria, sobre todo por la falta de medios y los planes de Puertos del Estado, con un reglamento de explotación en trámite que les retira equipos de protección y funciones, explica Artemis Casañas, portavoz del Sindicato Profesional de Policías y Bomberos (SPPB).

En la entrada sur del Puerto de La Luz, entre el parque de Santa Catalina y el muelle Sanapú, está proyectada la apertura de tres locales de ocio nocturno: uno en la azotea de la Fundación Puertos de Las Palmas, que obedece a una concesión de la propia APLP, y otros dos en el Centro Comercial El Muelle, que está gestionado por la empresa Divarian SA.

Trámites

La finalización de la reforma del centro comercial se retrasa seis meses, y los gestores de los nuevos locales nocturnos están negociando con el Ayuntamiento los permisos para abrir, al tiempo que la APLP ha autorizado la transformación de la azotea de la Fundación en un bar de copas con música. 

En estos momentos, tras el cierre de la discoteca Kopas y el ocaso del Sotavento en el Muelle Deportivo, no hay ningún local dedicado al ocio nocturno abierto en suelo portuario. De ahí la preocupación del sindicato policial, que teme el traslado al puerto de ese tipo de establecimientos.

Antecentes

Y es que la época del Sotavento fue crítica para la Policía Portuaria, con peleas e incidentes todas las noches en el Muelle Deportivo, un caos que derivó en importantes tensiones con el anterior presidente de la APLP, Luis Ibarra, hasta que finalmente se logró el cierre de la discoteca y, más adelante, los agentes lograron sus primeros chalecos para protegerse de posibles agresiones. "Aquello fue de locos", rememora Casañas.

El centro comercial Sotavento, en el el Muelle Deportivo de Las Palmas de Gran Canaria. / AH
El centro comercial Sotavento, en el el Muelle Deportivo de Las Palmas de Gran Canaria. / AH

Más pacífica y amable fue la etapa del Kopas, que congregaba a gente curtida en años y menos propensa a la trifulca. Aquí los mayores problemas eran de orines y de limpieza, causados por los estragos del alcohol y el deambular bajo sus efectos por las instalaciones portuarias.

Desde el Ayuntamiento se activó un plan de limpieza para adecentar la zona temprano, evitando situaciones incómodas a los turistas que vienen en crucero. De la seguridad se encargaba, al ser un espacio privado, el centro comercial y el personal de la discoteca. Eso, combinado con un perfil más tranquilo de cliente, hizo que las intervenciones de la Policía Portuaria fueran menores a las de Sotavento.

El fin de la tranquilidad

En cualquer caso, debido a la escasa oferta de ocio nocturno que existe en la ciudad, Casañas vaticina que la apertura de tres locales "será un triunfo", con el consiguiente trajín de personas y los problemas asociados al negocio de la noche.

Los muelles Sanapú y Santa Catalina, con su acuario, sus yates de lujo y su nueva terminal de cruceros en construcción, son ahora un remanso de paz y de tranquilidad.

Expectantes

La APLP, cuando se abran los nuevos locales, espera que todo siga en esa línea, aunque aclaran que en los dos establecimientos del centro comercial no tienen competencia directa. Sí en la terraza que abrirá en la azotea de la Fundación, cuya actividad estará centrada en el tardeo y la noche, aunque no hasta altas horas de la madrugada, explica su gabinete de prensa.

Desde el Centro Comercial El Muelle no han accedido a explicar el estado de los permisos de El Limbo y de Savana, ni cómo será esta nueva etapa que encaran en el Puerto de Las Palmas, con una apuesta clara por potenciar el ocio y la restauración para abrir esa parte del recinto a la ciudad.

Más seguridad

Al margen de la gestión privada de esos establecimientos, el sindicato mayoritaria en la APLP reclama a Puertos del Estado que no les quite medios para defenderse y que entiendan la "idiosincrasia" de los puertos canarios, con zonas abiertas y más conflictivas que las de los puertos pesqueros de la Península o de otros recintos pequeños o medianos.

En Baleares, por ejemplo, la Policía Portuaria se ha movilizado para impedir la retirada de los bastones extensibles, que son esas porras articuladas que se despliegan como medio de defensa.

Los agentes portuarios no tienen competencia directa en materia de seguridad ciudadana, pero son la primera fuerza actuante en los puertos y, además, tienen la obligación legal de colaborar con el resto de policías. De ahí que necesiten este tipo de recursos, no que se restrinja el uso de estas porras en el nuevo reglamento de gestión portuaria, entre otras medidas que debilitan su autoridad y abren la puerta a la gestión privada de la seguridad.