La Inspección de Trabajo ha puesto en marcha una investigación a la empresa de reparto a domicilio Uber Eats por utilizar aún a trabajadores bajo la figura de falsos autónomos. El principal problema está en que la conocida como Ley Rider, aprobada en 2021, llegó con el objetivo de sancionar a las compañías que siguieran empleando un modelo que se ha considerado abusivo.
La información, adelantada por El País, da a entender que desde el Ministerio encabezado por Yolanda Díaz pondrán el foco a nivel nacional en todas las comunidades autónomas donde detecten irregularidades que puedan derivar en posibles condenas. Es una situación que, al parecer, se puede dar en el Archipiélago según ha podido confirmar Atlántico Hoy porque se han registrado denuncias.
Empresas pantalla
Héctor Fajardo, secretario de organización de UGT Canarias, asegura en una entrevista concedida a este periódico que en los servicios jurídicos del sindicato se han encontrado con casos de falsos autónomos que estaban vinculados sobre todo a Uber Eats. Explica que hace un tiempo la entidad llegó a acuerdos con empresas pantalla que les permitían funcionar a la hora de prestar el servicio de forma externa.
Apunta que, a pesar de haber ido cerrando este tipo de empresas, la tendencia ha sido volver a los falsos autónomos. Pone sobre la mesa que también han detectado casos en Glovo, pero la compañía de las mochilas amarillas se ha decantado por la gestión directa después de haber recibido sanciones por parte de la Inspección de Trabajo. En ambos casos habrá que esperar a ver lo que ocurre en el futuro.

Versión de la empresa
El representante sindical considera que las prácticas de las que se acusa a Uber Eats son “un atentado contra los derechos de los trabajadores”. La empresa, en declaraciones concedidas a eldiario.es asegura que están cooperando plenamente con la Inspección de Trabajo, así como que están colaborando con el Gobierno central con el objetivo de garantizar la estabilidad del sector a largo plazo.
Además, señala que la investigación en curso solo acaba de empezar. Volviendo al objetivo de la Inspección, Fajardo subraya que existen algunos trabajadores que mantienen la modalidad de autónomos porque trabajan para varias empresas y ofrecen sus servicios gestionándose ellos mismos tanto su tiempo como su trabajo.
"De forma unilateral"
Pero en el caso de Uber Eats, dice, “los servicios están puestos de forma unilateral por parte de la plataforma”. “Cuando hay una vinculación de un trabajador a una de estas plataformas digitales, lo que lo que hace la Ley Rider es presuponer que hay una relación laboral del régimen general”, sostiene.
“El tema de los de los de los falsos autónomos es un atentado contra los derechos de los trabajadores, porque además están en una situación de explotación absoluta. Incluso ellos una de las cosas que nos dicen es que no quieren levantar mucho la liebre y están en una situación de precariedad”, prosigue.
"Les sale rentable"
Señala que desde el sindicato exigen una legislación mucho más coercitiva con este tipo de plataformas porque “la ley rider en su concepto teórico puede estar bien, pero en la práctica no está siendo efectiva”. “Mantienen una situación de falsos autónomos porque les sale rentable pagar ciertas sanciones durante un tiempo porque siguen haciendo negocio”, apostilla.
Fajardo pone sobre la mesa que se puede dar el caso de que la inspección no solo tenga que vigilar la situación de los falsos autónomos en plataformas como Uber Eats, sino también, dice, los presuntos fraudes a través de contratos fraudulentos donde se establezcan menos horas de las que realmente están ejerciendo los trabajadores.

