No es un decorado de cine ni una isla remota en el Pacífico. Es real y guarda uno de los secretos mejor guardados de Canarias. Un pueblo de La Gomera que invita a perderse entre montañas que quitan el aliento y playas paradisíacas, bien lejos del bullicio turístico.
Un municipio en plena naturaleza
En la vertiente suroeste de la isla de La Gomera se encuentra Valle Gran Rey, un paraíso natural compuesto por un conjunto de laderas y barrancos que descienden desde las cumbres del Parque Nacional de Garajonay hasta el océano Atlántico. Conserva un ecosistema único, con bosques de laurisilva y pinar protegidos por el Parque Rural de Dorama.
Este municipio abarca 33 km² y alberga a más de 4.600 habitantes, y su nombre no es casualidad. Cuenta la leyenda que aquí residía Hupalupa, un importante líder aborigen que gobernaba la isla antes de la conquista española. Un legado que se mantiene vivo hoy en día en cada uno de los rincones del valle.
Desde esta población se pueden explorar caminos milenarios, como el que pasa por los caseríos de Arure o La Calera hasta el mirador del Santo. Y aunque muchos visitantes llegan atraídos por los paisajes de la región, son las playas las que los acaban de conquistar. Valle Gran Rey cuenta con calas que parecen secretas, como la Playa del Inglés, famosa por sus atardeceres intensos y su ambiente bohemio, o el Charco del Conde, ideal para familias. Al abrigo del puerto, también se encuentra la Playa de Vueltas, desde donde es fácil ver barcas de pescadores movidas por la brisa marina.
Tradiciones de la región
Más allá de sus paisajes, Valle Gran Rey es conocido por la calidez de sus habitantes, descendientes de generaciones de agricultores y pescadores, y por sus festividades locales. Cada 6 de enero, la comunidad celebra el acto en honor a Nuestra Señora de Los Santos Reyes, donde se realiza la tradicional ofrenda del Ramo, una estructura decorada con flores, frutas y dulces, confeccionada por una familia local como muestra de devoción y gratitud. Una vez terminada la festividad, el ramo se entrega a otra familia para continuar la tradición al año siguiente.
Otras celebraciones incluyen las fiestas de San Antonio de Padua el 13 de junio en Guadá, San Juan Bautista el 24 de junio, y la Virgen del Carmen el 16 de julio, en la que se hace una procesión desde el muelle de Las Vueltas hasta el barrio de La Rajita . Además, cada cinco años, el municipio participa en la bajada de la Virgen de Guadalupe, una peregrinación que recorre toda la isla y que refuerza los lazos entre las distintas comunidades gomeras
Valle Gran Rey también es hogar de tradiciones únicas como el silbo gomero, un lenguaje silbado declarado Patrimonio de la Humanidad, que se enseña en las escuelas locales de La Gomera.
Dónde comer en Valle Gran Rey
La propuesta gastronómica de Valle Gran Rey se sustenta en la sencillez y la calidad de sus ingredientes. Entre su amplia oferta de restauración, destacan El Mirador o La Chalana, situados en el centro del municipio. Son famosos por sus recetas tradicionales de almogrote, una pasta de queso curado con ajo y pimiento, y el potaje de berros, un plato típico de Canarias.
También hay locales como El Camarote, que han hecho de la cocina con producto fresco una seña de identidad. Su carta se nutre de ingredientes de cercanía y apuesta por proveedores locales, una filosofía que no solo potencia el sabor, sino que refuerza su compromiso con un turismo más sostenible.
En cuanto a la repostería, se pueden probar postres tradicionales como la leche asada con miel de palma, elaborada con savia de palmera canaria y un toque de canela, el quesillo gomero, un flan casero suave y caramelizado, o los rosquetes canarios.
