La pasarela de Padre Anchieta avanza muy poco a poco en su construcción y parece que estará lista finalmente en febrero de 2026, con casi cuatro años de retraso. Ahora, ell área de Carreteras del Cabildo de Tenerife ha comenzado a instalar dos de los módulos de conexión entre el anillo de la pasarela peatonal del Padre Anchieta con el intercambiador de La Laguna, uno de ellos el más largo de los siete instalados, con 35 metros de longitud y 50 toneladas de peso.
Según ha informado este martes el Cabildo en una nota, las labores se llevarán a cabo durante la noche de este martes y este módulo supone la instalación del primero de los siete módulos que transcurren hacia la zona del intercambiador de La Laguna. "Se trata de un módulo especial con el que comenzamos la recta final de la instalación de la pasarela", ha dicho el consejero de Carreteras del Cabildo, Dámaso Arteaga.
Febrero 2026
Esta pasarela ya debería estar en uso. Las promesas de Dávila eran que estaría lista para el comienzo del curso 2025-2026, pero los últimos anuncios dicen que su puesta en marcha se retrasa cuatro meses (más), hasta febrero de 2026. Según detalla la presidenta, las cuatro piezas que faltan llegarán el próximo mes de enero, las que conectan "el Intercambiador de La Laguna, donde están la escalera y el ascensor, con lo que estaríamos en febrero ultimando la conexión y la puesta en marcha del Gran Anillo Peatonal de Padre Ancheta".
Dávila ha achacado los retrasos a los problemas para el transporte de mercancías y la subida del precio del acero. Esta infraestructura, dicen, aliviará "la situación de congestión de tráfico en un punto por el que cada día circulan 50.000 vehículos y 20.000 peatones, la mayoría estudiantes de la Universidad de La Laguna, quienes actualmente deben cruzar la vía a través de doce pasos de peatones, generando continuas retenciones y riesgos viales".
Reorganizar el tráfico
La inversión total de esta infraestructura, ha recordado el Cabildo, es de unos 10 millones de euros y el objetivo es reorganizar el tráfico en la glorieta de Padre Anchieta, una de las intersecciones más transitadas de la TF-5 por la que confluyen a diario más de 50.000 vehículos y 20.000 peatones, la mayoría estudiantes de la Universidad de La Laguna, que actualmente cruzan la vía a través de doce pasos de peatones, lo que genera retenciones y riesgos viales.
La actuación incluye, además, una reurbanización integral del entorno urbano, como nuevas aceras, la reubicación de la estatua del Padre Anchieta y la creación de una plaza ajardinada junto a la Facultad de Biología, con integración al Intercambiador de Transportes de La Laguna.